Lo dijo el titular de la Cámara Empresaria del Transporte Multimodal de Pasajeros, Saul Isacson, quien manifetó que si no hay un rápido acuerdo entre la provincia y la Nación habrá empresas que no sólo no podrán afrontar los sueldos de sus empleados sino que irán a la quiebra. Además explicó por qué los usuarios del sistema no podrían afrontar una tarifa plana
“Para el transporte que cubre distancias por fuera del ejido de la ciudad, la quita del subsidio por parte de la Nación es un mazazo importante como cada vez que estamos en un período de alta inflación”, dijo Saul Isacson, presidente de la Cámara Empresaria del Transporte Multimodal de Pasajeros. Y anunció que “al tener una tarifa fijada por el gobierno en general, éste suele atrasarse y ya veníamos con un retraso importante. Pero si a eso se le suma la quita del subsidio nacional nos deja a la mayoría de las empresas en una situación de quiebra”.
El titular de la cámara que nuclea a las empresas que hacer trayectos interurbanos de corta y media distancia, aseguró al programa La Marca de la Almohada que “ya se empezó a hablar con las autoridades de la provincia de cara a una solución que sabemos no será sencilla ni barata”. Y sostuvo que “por lo hablado hasta el momento, habrá una parte del subsidio que quitó la Nación que pondrá la provincia ya que comparte la preocupación que tenemos nosotros pero hasta ahora no hay nada concreto”.
Además, Isacson recordó que “los ingresos que significaban el aporte de la Nación eran del 25% aproximadamente del total del ingreso de las empresas y para reemplazarlo la provincia debería aportar otro 35% además del atraso tarifario que tenemos y con eso llegaríamos a una tasa del 100%. Pero no hay que transmitirle temor a la gente, a los ususarios, a pesar de los números importantes de los que hablamos”.
El empresario también dijo que “si hay una gestión para recuperar ese subsidio que la Nación dejó de enviar debe ser de la provincia. Nosotros nunca tuvimos relación con la Nación que le manda el dinero a la provincia y es ésta la que lo redistribuye. La gestión debe ser entre gobernadores, intendentes y la Nación. Esperamos que esto se revea”.
Acerca los plazos para solucionar el conflicto, Isacson dijo que “no los hay pero el aumento debe ser rápido” y explicó que “ya hubo problemas para pagar los sueldos de enero, que recién terminaremos de abonar esta semana; estamos en medio de una negociación paritaria con nuestro personal y con esto quiero decir que para pagar el sueldo de febrero deberíamos tener una solución inmediata porque sino no podremos hacer frente a ellos. Hay un margen de un par de semanas para lograr el acuerdo”.
Todo eso en medio de una conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo que evitó el paro de colectivos que iba a realizar la UTA la semana pasada en el marco de la negociación paritaria y de la cual Isacson dijo que “hay una reunión esta semana para intentar destrabar el conflicto cuya solución es compleja porque nos falta una parte de los subsidios que no tenemos definido de dónde van a salir”. Y fue tajante al afirmar: “Nosotros hoy no estamos capacitados para pagar el aumento que solicitan los choferes con los ingresos que tenemos”.
Finalmente, el empresario dijo que “en el sector nunca estuvimos en una situación tan grave como la actual porque se dio de forma abrupta. Hasta 2011 había empresas que cubrían más de 60 kilómetros que no cobraban subsidios, y desde 2003 lo cobraban las demás integrantes del sector, sin embargo se podía vivir con una tarifa acorde y una población que podría pagarlos. Hoy una tarifa que no contemple subsidios sería impagable para la mayoría de la gente y por eso el planteo que hacemos. Y decimos que serían tarifas impagables porque lo que se le cobraba al pasajero se fue reduciendo y hoy la inflación impactó a todo el mundo y no hay recomposición salarial, por lo que creo que una tarifa plena sería imposible de abordar por cualquier usuario de nuestro servicio”.