Mario Ramos, politólogo y consultor en Doxa Data, analizó la gestualidad, posturas y todo lo que dejó el debate entre los dos candidatos a presidente
El politólogo Mario Ramos, consultor en Doxa Data y docente en la Universidad Nacional de Rosario, analizó lo que dejó el debate presidencial entre Sergio Massa y Javier Milei, que se llevó a cabo el domingo 12 de noviembre.
En diálogo con La Marca de la Almohada, Ramos consideró que “en el debate quedó expuesto, independientemente del contenido, la gestualidad de los candidatos. En ese sentido, pudimos ver una posición muy sólida de Sergio Massa quien consiguió incomodar a su oponente”.
“Javier Milei no se desestabilizó como algunas personas esperaban. Sí se lo vio incómodo o falto de reacciones, pero no se sacó”, agregó.
Para Ramos, el desafío del debate era hablarle al 10-15 por ciento de la población que se manifiesta indeciso. En un escenario tan parejo, este bloque es muy importante. Y aquí Sergio Massa, en especial en los 2 temas iniciales, logró dominar el debate y evitó hablar de inflación”.
“El amateurismo propio de Milei quedó expuesto al entrar en la lógica binaria que propuso Sergio Massa a partir de las preguntas ‘por sí o por no’ y lo mismo sucedió en el bloque se seguridad”, sostuvo.
En ese sentido, Ramos consideró que “la estrategia de Massa de enviar a googlear desactivó a Milei en su capacidad de responder. Mandar a googlear es dar lo dicho como verdad y posicionarse desde ese lugar para hablar”.
“En definitiva, el debate fue positivo para Sergio Massa, que logró posicionarse como un candidato moderado y pragmático, con propuestas concretas y viables. En cambio, Javier Milei mostró sus limitaciones, en especial en su falta de conocimiento y experiencia”, concluyó Ramos.