Más de 50 mil personas ya pasaron por la basílica. El féretro permanecerá hasta el viernes. El sábado será el solemne funeral y luego el entierro.
Más de 50 mil personas ya desfilaron por la Basílica de San Pedro para darle un último saludo al Papa Francisco, fallecido el lunes, informó la sala de prensa del Vaticano, y la fila de fieles que aguardan hacerlo supera los dos kilómetros.
La basílica permaneció abierta toda la noche, pese a que estaba previsto que cerrara a medianoche y hubo quienes debieron esperar hasta tres horas en plena madrugada para poder acercarse al féretro con el cuerpo del Pontífice.
Solo cerró entre las 5.30 y las 7 de la mañana, para reorganizar la guardia.
El miércoles, los dolientes hicieron fila durante hasta cuatro horas para despedirse de Francisco, quien vestía sus vestimentas papales —casulla roja, mitra blanca y zapatos negros— y llevaba un rosario entre los dedos.
Pero fue tal la demanda que cada doliente fue conducido ante el féretro en cuestión de segundos, y muchos capturaron el momento rápidamente en sus celulares.
Entre quienes se acercaron hoy a la basílica estuvo el embajador de Israel ante la Santa Sede, Yaron Sideman, que escribió en X que lo hizo “en nombre del Estado de Israel”, luego de la polémica que surgió por la falta de un mensaje de condolencias ante la muerte del Papa de parte del premier Benyamin Netanyahu.
El féretro abierto con el cuerpo del Pontífice permanecerá hasta el viernes a la tarde, cuando se realizará la ceremonia del cierre del ataúd y el sábado será el solemne funeral, para el que se esperan al menos 170 delegaciones oficiales y la llegada de más de 20 mil fieles de todo el mundo.
Tras el funeral, el féretro de Francisco será trasladado a su iglesia favorita, la basílica papal de Santa María la Mayor en Roma.
Su testamento disponía que fuera enterrado, con una sola palabra en su sencilla tumba: Franciscus.
Después, todas las miradas se centrarán en el proceso de elección del sucesor de Francisco. Cardenales de todo el mundo regresan a Roma para el cónclave, que comenzará entre 15 y 20 días después del fallecimiento de un Papa. La fecha exacta aún no fue decidida.
Fuente: ANSA