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Proyecto para que no se detengan las obras de integración en barrios populares

Lo presentó la diputada provincial justicialista Lucila De Ponti ante la amenaza de la Nación de eliminar el Fondo de Integración Sociourbana que permite llevar adelante esas transformaciones en barrios marginales. La legisladora también se refirió al drama que viven los jóvenes de esos sectores y a la muerte de Ezequiel Curaba, el chico de 21 años que sufrió una descarga eléctrica mientras robaba cables en zona oeste

La diputada provincial Lucila De Ponti presentó un proyecto en la Cámara baja santafesina para que se busquen de manera urgente alternativas para dar respuestas al quite que la Nación hará del Fondo de Integración Sociourbana que garantiza la concreción de una serie de obras en los barrios populares de distintas localidades. En ese sentido, dijo que “si el gobierno nacional quisiera darle continuidad a estas obras podría hacerlo tranquilamente ya que el fondo se financia con un porcentaje del Impuesto País que se le cobra a todos los argentinos que realizan operaciones en dólares y que ha aumentado considerablemente en los últimos meses producto de las decisiones macroeconómicas, así que en todo caso lo que hay es una decisión de incumplir con una ley que establece cómo se recauda y distribuye ese fondo”.

Al respecto, la legisladora manifestó a La Marca de la Almohada que “no somos ajenos a las ideas y planes que lleva adelante este gobierno así que nos parece fundamental buscar entre la provincia y los municipios la forma de seguir adelante con una treintena de obras que están en ejecución en Santa Fe, donde tenemos registrados unos 470 barrios populares aunque hay más sin censar y para los cuales esto es claramente una necesidad urgente”.

De Ponti planteó que “se debe repensar, a partir de las decisiones que está tomando la Nación con la quita de subsidios a diferentes sectores, cuáles son las prioridades que las provincias y los municipios tendrán sin esos recursos”. Y, en ese sentido, explicó que “de esa manera habrá que ver qué es importante y para quién. Para nosotros las obras en los barrios populares son trascendentes porque es el hábitat de mucha gente marginada, pero además porque tiene que ver con la integración de esos barrios a la ciudad y también tiene que ver con la seguridad, la sustentabilidad y el transporte entre otras cuestiones”.

“En algún momento el gobernador (Maximiliano) Pullaro habló de avanzar en un esquema impositivo distinto al actual gravando a quienes más tienen, y en Santa Fe hay sectores económicos que van a tener un año muy rentable en términos de su producción y actividad por lo que entonces debemos pensar cómo entre todos colaboramos para que esa quita de subsidios nacionales no afecte el desarrollo local en barrios populares, el transporte, los salarios de docentes y empleados públicos”, agregó De Ponti.

La diputada también se refirió al posible retiro de las fuerzas federales que están actuando en algunos barrios de Rosario después del enojo que la Nación manifestó por la caída de la Ley Ómnibus. “Sabemos que hubo un traslado de gendarmes hacia Buenos Aires para el operativo que se montó en derredor del Congreso mientras se debatía la ley, pero no tenemos información oficial sobre que se retire el resto de los efectivos. Pero lo fundamental para Santa Fe es tener un plan concreto para hacerle frente a la violencia y la inseguridad y en ese marco los recursos humanos que envía la Nación son importantes para esa planificación pero no es lo único que se requiere”.

Finalmente, la diputada justicialista hizo referencia al caso del joven Ezequiel Curaba, quien tenían 21 años y falleció tras sufrir una descarga eléctrica mientras robaba cables en avenida Presidente Perón al 6000, un hecho que generó una conmoción importante, ligada a la grave situación social que empuja la gente a una situación de extrema vulnerabilidad. “Me parece muy triste lo ocurrido desde donde se lo mire y leía el mensaje de la maestra de este chico (Melina Gigli, docente de la escuela Carlos Fuentealba del Barrio Santa Lucía a la que asistía Ezequiel yque trascendió a través de redes sociales), algo que muestra el lado más humano de un episodio que los medios de comunicación nos mostraron casi morbosamente el fin de semana. Esto habla de la situación en la que estamos y nos lleva a pensar que el tema de la seguridad y la violencia no sólo se arreglará con más presencia y política policial sino que es imprescindible una presencia del Estado en los territorios más abandonados y vulnerables con mucho más peso del que se tuvo hasta ahora en cualquiera de los gobiernos anteriores”.

De Ponti dijo que “el problema es grave, llevamos más de 10 años de una violencia letal que va haciendo mella y dejando marcas en los jóvenes de nuestros barrios y que terminan visibilizando cómo única salida a su situación involucrarse en organizaciones narcocriminales o,  producto de la desesperación y el hambre, robando lo que haya como en el caso de Ezequiel,  afectando la calidad de vida de los ciudadanos. Por eso tenemos, quienes estamos en lugar de toma de decisiones, tener una dimensión real del problema del cual lo ocurrido con Ezequiel es sólo un síntoma, una expresión y que nos lleva a pensar cómo reconstruir un tejido social dañado para ofrecer alternativas de proyectos de vida vinculados a la educación y el trabajo, a otro tipo de institucionalidad que el Estado ha abandonado”.