El staff técnico del organismo confirmó el entendimiento, que incluiría una devaluación y flexibilización cambiaria. El directorio definirá este viernes su aprobación final

El Fondo Monetario Internacional (FMI) anunció un acuerdo de principio con el gobierno argentino para un nuevo programa de facilidades extendidas por USD 20.000 millones a cuatro años, destinado principalmente a refinanciar la deuda del préstamo de 2018. El directorio del organismo evaluará la aprobación este viernes, aunque persisten incógnitas sobre el monto del primer desembolso, clave para aliviar la presión sobre las reservas del Banco Central. Según fuentes cercanas a la negociación, el ministro Luis Caputo fue desplazado de las tratativas finales por resistencias del equipo técnico del FMI, siendo reemplazado por el economista chileno José Luis Daza.
El acuerdo implica contrapartidas exigidas por el Fondo: una devaluación que llevaría el dólar oficial a una banda entre 1.300 y 1.700 (frente al actual “crawling peg” del 1% mensual), el desmantelamiento del swap con China, y avances en reformas laborales y previsionales. A cambio, el organismo consideraría aumentar el primer desembolso del 40% al 60% del total (USD 12.000 millones). La negociación se dio en paralelo a otra jornada volátil en los mercados, donde el riesgo país tocó los 1.009 puntos (récord desde octubre) y el Merval cayó 1,7%, afectado por la escalada de la guerra comercial entre EE.UU. y China.
Mientras el gobierno espera los USD 8.000 millones iniciales para estabilizar el mercado cambiario, el BCRA continuó vendiendo reservas en otra rueda con presión alcista sobre los dólares paralelos. El acuerdo llega en un contexto crítico: las reservas netas se ubican en mínimos históricos y la inflación sigue siendo una de las más altas del mundo. Si se concreta, sería el sexto programa argentino con el FMI en las últimas dos décadas, aunque su implementación enfrentará desafíos políticos y sociales ante las duras condiciones exigidas.