Médicas y médicos vinculados al Sindicato de Profesionales Universitarios de la Sanidad reclaman un aumento salarial de emergencia que cubra el 25% de pérdida de poder adquisitivo que tuvieron en 2024. No habrá atención en efectores públicos provinciales.
Además piden también por pases a planta de 500 trabajadores monotributistas, el pago de adicionales y por la falta de medicamentos que hay en todos los efectores.
La medida de fuerza es también para alertar sobre el abandono de muchos profesionales a sus cargos lo que produce un vacío en todos los servicios.
“Los profesionales están renunciando todos los días y al gobierno provincial parece no importarle. Es más, creemos que quieren reducir la cantidad de médicos, odontólogos, psicólogos y del resto de los profesionales” advirtió Diego Ainsuain titular de SiPrUS.
“Un profesional con 9 o 12 años de estudios universitarios que atiende en una guardia, en una terapia o en un consultorio de un centro de salud u hospital cobra hoy 950 mil pesos cuando debería estar ganando 1.900.000 pesos de acuerdo a su responsabilidad y a la canasta de gastos del INDEC”
Desde SiPrUS plantean que la destrucción del salarial, la falta de cobertura de los cargos, el recorte de insumos es la única política de salud del gobierno provincial. El ajuste se ve también en la comprar de medicamentos.
“Tenemos cada día más dificultad para que lleguen a los efectores la medicación psicotrópica, los anticonceptivos, las drogas oncológicas y cardiovasculares. La gente se va sin sus tratamientos o hay que cambiarles todos los meses la medicación por otra distinta. Es desesperante” concluyó Ainsuain.