El ministro de Gobierno de la administración de Maximiliano Pullaro repasó la situación con la que recibieron el Estado y afirmó que hay voluntad de mejorar la política salarial, regularizar deudas con proveedores y municipios y sostener la obra pública sobre la base de no gastar más allá de los ingresos

Se encontraron con grandes dificultades al asumir, en todas las áreas. Con esa síntesis, el radical Fabián Bastía inició un extenso diálogo con el programa Apuntes y Resumen sobre los 60 días de la administración de Maximiliano Pullaro en la Casa Gris.

Con más detalle, el ministro de Gobierno señaló que los proveedores del Estado no querían venderle nada al Gobierno de Santa Fe por las deudas impagas. En ese sentido, punteó acreencias arrastradas desde julio en obra pública, otras que databa de 90 y 120 días y las que se mantenían con los municipios y comunas. A ello le sumó la existencia de déficits de medicamentos y falta de mantenimiento en los hospitales y escuelas, y una situación crítica en el equipamiento de movilidad pública, en particular la del servicio 107 y en el área de Seguridad: ambulancias y patrulleros.

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También, agregó, están en proceso de regularizar deudas de Vialidad Provincial con municipios y comunas impagas desde noviembre de 2022. En los dos meses de la actual gestión, destacó, ya se normalizaron hasta noviembre de 2023.

En síntesis, siguió, comenzaron a revertir una dinámica de desorden, desmanejo y falta de gestión de los recursos públicos. Como ejemplo, citó la gran cantidad de vehículos de diferentes dependencias abandonados por pequeños desperfectos, que comenzaron a recuperar. Otro punto, señaló, es el de las empresas públicas como ASSA (Servicios sanitarios) y EPE (distribución de energía). Ambas, planteó, las recibieron con uncuadro tarifario atrasado, falta de insumos para las reparaciones y otras deficiencias.

Un Estado “desordenado y desatendido”, insistió el funcionario. Sobre esa base, indicó, las autoridades trabajaron con la planta de personal estatal de todos los ministerios y reparticiones para, en 60 días, cambiar la lógica de funcionamiento de la administración. En ese sentido, explicó, se tomaron medidas de control de gastos y se estableció una prioridad de situaciones para resolver.

Todo, repitió, sin gastar más allá de los ingresos, con eficiencia y austeridad. Bastía añadió que la anterior gestiòn, enbcabezada por Omar Perotti, terminó con un déficit de 200.000 millones de pesos, de los cuales 30.000 corresponden a la EPE. También la caja de jubilaciones, con un déficit de 173.000 millones, según los informes técnico de los que disponen.

Docentes y otros empleados públicos

El ministro de Gobierno recalcó que la voluntad del Gobierno de Pullaro es la mejora de los ingresos y calidad de vida de los docentes y también la del sistema educativo. Aclaró que administran una situación crítica. Y que por eso se hizo hincapié en el costo que representa el ausentismo, que es un vicio, aclaró, no de los trabajadores sino del sistema, de larga data. Otro de los ejes en esa área es la mejora de las instalaciones de las escuelas. Y dar de baja el llamado régimen continuo o de no repitencia.

Sin embargo, el ministro enfatizó que la voluntad de mejorar los ingresos docentes está relacionada con los recursos que se administran. El 14% ofrecido es a partir de enero, y se pagará por planilla complementaria en este febrero. Respecto del 36,4% correspondiente a la activación de la clàusula gatillo negociada con la gestión anterior, eso está atado a la premisa de no exceder el límite marcado por los ingresos pùblicos. Lo que se ofreció, dijo en referencia a todos los empleados públicos, es lo que permitió el aumento de la recaudación del período: un 14%. La aspiración, recalcó, es completar la cláusula gatillo en febrero, también por planilla complementaria a cobrar en marzo. Esa modalidad, indicó, es porque los datos tributarios no están disponibles sino sobre fin de mes.

Sobre el tema, Bastía recordó que la modalidad de paritaria acordada por el gobierno de Perotti con los agentes públicos fue irresponsable: en agosto pasado, después de las PASO y cuando todo indicaba que el Gobierno iba a cambiar de color político. Se hizo, añadió, sin consulta con el espacio que ahora gestiona la provincia. A favor, admitió, fue antes de las medidas implementadas por el ministro de Economía y candidato presidencial Sergio Massa, que impactaron en la provincia en particular lo referido a la quita de Ganancias a la cuarta categoría, que es un impuesto coparticipable. Tampoco estaba en el horizonte, siguió, la devaluación al inicio de la gestión presidencial de Javier Milei.

Alrespecto, el ministro puso contexto: el Gobierno también debe ocuparse de asistir a los trabajadores del sector privado que perdieron los puestos laborales por la cirsis. Y sobre la obra pública, afirmò que se va a continuar, aunque condicionada por la situación económica. En ese sentido, destacó que se iniciaron gestiones de financiación nacionales e internacionales, a la par que se cumple con la deuda atrasada.