Inspectores de la provincia y de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo realizan entre jueves y viernes un monitoreo técnico de las áreas de actividad y las maniobras portuarias habituales. El informe determinará si hay que hacer cambios
Las terminales I y II del puerto de Rosario estaban sin actividad por una huelga del gremio de estibadores (Supa) luego de que un siniestro en la descarga de productos siderúrgicos desde un buque, en la madrugada del viernes último, causara la muerte del operario Juan José Contreras. Esa parte está bajo concesión de la sociedad TPR (Terminal Puerto Rosario) que integran Vicentin y la chilena Ultramar, con antecedente de incumplir inversiones en mantenimiento de las instalaciones. Tras idas y vueltas y al final el acatamiento de la conciliación obligatoria dictada por la provincia, lo que sigue es la verificación de las condiciones de higiene y seguridad de las instalaciones y las operatorias.
Apuntes y Resumen conversó con el ministro de Trabajo de Santa Fe, Juan Manuel Pussineri, sobre cómo se llevará a cabo el relevamiento. El funcionario explicó que arrancó este jueves y terminará el viernes, y está a cargo de personal provincial y de la Superintendencua de Riesgos de Trabajo de Nación. Es la etapa que sigue en el conflicto tras el acatamiento de la conciliación obligatoria por parte del sindicato de los estibadores, Supa, y la empresa concesionaria, que tras algunas evasivas, se cumplió el lunes último.
La entrevista completa con Juan Manuel Pussineri ↓
Se trata de una “inspección integral de las condiciones de seguridad” de los muelles y de las maniobras portuarias habituales en los muelles I y II. A partir del informe respectivo, que tardará unos días, se decidirá si hay que hacer modificaciones en la infraestructura o cambios en las operatorias.
Pussineri explicó que “está claro que la responsabilidad principal por el cumplimiento de la normativa y de las especificaciones que se determinen corre por cuenta de la empresa y es la empresa la que primero debe observar las reglamentaciones que hacen a la salud y seguridad de los trabajadores”.
El ministro agregó que la investigación del siniestro fatal que desató el conflicto sigue su curso, y una vez que concluya “se establecerán si existen o no responsabilidades por parte de la empresa y, en su caso, las sanciones que corresponde aplicar”.
El sindicato denunció precarias medidas de seguridad. Además, la operatoria en la que se produjo el siniestro fatal del viernes pasado fue mediante una maniobra con una plataforma flotante porque en los muelles -sólo está operable el 50 por ciento- hay riesgo de derrumbes por socavones, que los trabajadores atribuyen a la falta de inversión de la concesionaria.