El 6 de mayo, hay nueva cita de sábado, a las 19.30 en San Martín 750. Y después, doblete por el 103.3 del dial. Una vuelta al disfrute de los buenos músicos locales del género
“Nota musical utilizada para aportar la expresividad característica… que nace de los cantos vocales tradicionales de buena parte de los estadounidenses negros de origen esclavo, y en su manera de entonar basada en una forma de atacar la nota fuera de tono según el sistema temperado occidental”. La definición técnica ni se acerca al sentimiento y la sensibilidad que transmite el blues, pero ahí está.
También está la posibilidad de disfrutar, a partir de este sábado y los siguientes, esa música en el Espacio Cultural Universitario (ECU), de San Martín 750. Todo, organizado por Blues Mundano, el programa de Radio Universidad nacido, aclaran sus creadores, “el siglo pasado” y que se emite los lunes entre las 21 y las 23.
Fabián “Negro” Romero es uno de los creadores del mítico espacio radial que irradia blues desde 1997. La idea, dice, es recuperar un formato que se ha perdido: la música de la radio en vivo. Incluso, lo tuvo durante un tiempo la propia emisora de la UNR en la planta alta de Urquiza 2050, donde estaba la pequeña pero cálida sala bautizada Cortés Plá, con las butacas y el escenario justos para memorables conciertos íntimos.
Ese espacio ya no existe, pero hay recreación posible gracias a la tecnología y la voluntad. A partir de este sábado, los músicos del género mostrarán su arte de cara al público en San Martín 750, y los sonidos se replicarán luego, con esa espontaneidad, en el 103.3 del dial o en el streaming de internet desde Urquiza 2050. Imposible estimar la audiencia por la red o a través del aire, pero la presencial, en el ECU, dispondrá de 300 localidades.
El antiguo edificio cedido por el Banco Nación a la UNR es un escenario ideal, con un “invitado” de lujo, el piano de media cola Yamaha C7. La cita es, de ahora en más, todos los sábados de 19.30 a 21.30, con entrada gratuita. Y no solo para amantes del género. La intensión es seducir a nuevas audiencias, tentar, dice El Negro, a quienes todavía “no se atrevieron” a su disfrute. Y nada mejor que cara a cara, instrumentos y voces a oídos.
Romero insiste en que la idea, en paralelo, es apuntalar a las más de 20 bandas de blues que contra viento y marea hacen música en la ciudad. Otro formato que el programa suma a, por ejemplo, el Festival Yo Nací en Rosario, pergeñado en noviembre del año pasado con sede y gran convocatoria en la Sala Lavarden. Y lo más nuevo, el Club de Blues, que funciona, viernes de por medio, en el reducto de El Aserradero, en Montevideo 1518, con un formato de asociación que permite bancar a los grupos rosarinos.
Ahora, se pone en marcha el Ciclo de Blues. El puntapié inicial le corresponde al cuarteto Penny Glamour, con Natalia Nardiello en piano y la cantante Andrea Passerini.