La diputada provincial y convencional constituyente de Más para Santa Fe destacó que el proceso debe estar guiado por una “responsabilidad histórica” y orientado a construir un Estado más eficiente, con mayor control social sobre las políticas públicas

La diputada provincial Lucila De Ponti, integrante de la Convención Constituyente por el espacio Más para Santa Fe, dialogó con La Marca de la Almohada en la previa al inicio formal del proceso de reforma de la Constitución santafesina. Para la legisladora, el debate que comenzó este lunes representa una “gran responsabilidad” para los convencionales, que deben encarar la tarea con la mira puesta en lograr un texto moderno, inclusivo y con fuerte legitimidad social.
“Es una gran responsabilidad que nos han dado los santafesinos para cumplir esta tarea”, expresó De Ponti, al asumir el mandato conferido por las urnas en los comicios del pasado abril. “Es fundamental hacerlo con una perspectiva de responsabilidad histórica que debe tener como resultado una Constitución con el mayor nivel de legitimidad posible”, sostuvo.
La legisladora enfatizó que el nuevo texto constitucional debe ser “mejor que el que tenemos hoy, en términos de los derechos que consagra”, y que se requiere “un Estado más eficiente para que esos derechos sean operativos”, es decir, que se puedan ejercer efectivamente en la vida cotidiana. En ese sentido, apuntó a la necesidad de construir una Carta Magna que la sociedad pueda “apropiarse como un elemento propio para defenderse”.
Consultada sobre los temas prioritarios del debate, De Ponti subrayó que existen numerosos artículos de gran importancia, pero que el eje debe estar en rediseñar la institucionalidad provincial. “Lo importante es poder rediseñar una institucionalidad que le permita a la sociedad santafesina tener una participación más contundente en la toma de decisiones y control de las políticas de Estado”, indicó.
Entre las propuestas de su espacio, la diputada mencionó la intención de “proponer una nueva institucionalidad, donde se concentren las herramientas de la democracia semidirecta”, además de fortalecer la figura de las defensorías, fomentar la rendición de cuentas y ampliar los mecanismos de participación ciudadana.
“Se trata de cómo la sociedad tiene mayor control sobre las acciones de sus representantes políticos, a través de mecanismos como las políticas ambientales, de género y de transparencia”, agregó. Para De Ponti, una de las claves está en empoderar al “poder ciudadano”, en un marco de control público y rendición de cuentas.
Respecto a la distribución de cargos en la Convención, que tendrá 69 integrantes, De Ponti recordó que la presidencia quedó a cargo del oficialismo, representado por Unidos para Cambiar Santa Fe. Sin embargo, planteó que la vicepresidencia corresponde a Más para Santa Fe por ser la segunda minoría. “Esperamos que se respeten las normativas básicas de cualquier cuerpo parlamentario”, advirtió.
En esa línea, interpeló al propio gobernador Maximiliano Pullaro: “Si es consecuente con su campaña, en la que planteó que nadie está por encima de la ley y que debe haber mayor participación de la sociedad, no habrá problemas para acordar”.
Sobre la posible inclusión del mecanismo de Ficha Limpia, la diputada aclaró que “los mecanismos anticorrupción no tienen que ser ejercidos solamente por un poder del Estado”, sino que deben estar acompañados de mecanismos de vigilancia y participación ciudadana. “Es la sociedad la que también tiene que poner límites, y no solo el cuerpo político”, destacó.
De Ponti consideró que el proceso constituyente ofrece una oportunidad única para revisar aspectos clave del sistema político provincial, incluyendo la forma de selección de autoridades, los límites a las reelecciones y la autonomía municipal, pero también para incorporar nuevos derechos en materia ambiental, digital, educativa, de salud y género.
“La Constitución tiene que reflejar las necesidades y aspiraciones del siglo XXI. No podemos seguir atados a una estructura pensada en los años 60. Este proceso tiene que ser una herramienta para modernizar el Estado, fortalecer la democracia y garantizar igualdad de oportunidades”, sostuvo.
Finalmente, insistió en que el nuevo texto no debe ser solo una reforma entre élites políticas, sino que debe ser acompañado por la ciudadanía: “La legitimidad de una Constitución no se construye solo con votos en la Convención. Se construye con la participación, con el diálogo, y con la capacidad de traducir los intereses de la gente en normas concretas”.