El dólar ilegal en Argentina cayó en 80 pesos y cotizó promedio en $930 en Rosario, como consecuencia de la reciente ampliación del Swap con China. Cómo impacta este fenómeno financiero en el contexto político previo a las elecciones presidenciales del 22 de octubre

Este miércoles se mostraron importantes cambios en el mercado financiero, el dólar paralelo experimentó su caída más pronunciada del año. Esta abrupta disminución, que totalizó 80 pesos, situó su valor en $905 para la venta en las cuevas del microcentro de Capital Federal. Sin embargo, vale la pena destacar que a pesar de esta baja, el dólar blue sigue manteniéndose considerablemente por encima de los niveles preexistentes a las elecciones primarias de agosto. En la ciudad de Rosario, por su parte, la divisa norteamericana fluctuaba entre los $915 y $940.

Antes de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), el dólar blue se cotizaba a $607. A partir del lunes siguiente a dichas elecciones, esta moneda experimentó un ascenso vertiginoso, llegando a alcanzar la semana pasada los $1,050. Finalmente, su valor se estabilizó en $905, lo que representa un incremento de casi 300 pesos en poco más de dos meses. Este fenómeno generó una fuerte aceleración en la tasa de inflación, que se aproximó al 13% en los meses de agosto y septiembre.

Mauricio Funes, Licenciado en Administración de Empresas con especialización en Finanzas por la Universidad Nacional de Rosario (UNR), dialogó con La Marca de la Almohada y analizó en profundidad el impacto del anuncio de la ampliación del Swap con China en el mercado del dólar ilegal y en las diversas variantes de dólares financieros.

Funes señaló que la responsabilidad de esta caída del dólar blue y el ascenso del dólar financiero recae en parte en el acuerdo de ampliación del Swap con China, que aporta previsibilidad al gobierno y fortalece sus reservas a corto y mediano plazo, al mismo tiempo que permite un mayor control sobre las operaciones en el mercado negro de divisas. El experto destacó que cuando el dólar ilegal alcanzó la marca de $1,000, varios analistas consideraron que su valor estaba “significativamente inflado”. En ese orden sostuvo: “Es plausible pensar que esta caída repentina esté relacionada con la toma de ganancias, especialmente tras el anuncio del acuerdo con China”.

Respecto al dólar financiero, Funes apuntó que el dólar MEP superó los 900 pesos, mientras que el Dólar con Liquidación (CCL), utilizado para transferir dólares al extranjero, cotizó entre 980 y 982 pesos. Estos dólares financieros se obtienen mediante operaciones con bonos a través del mercado de capitales, las Agencias de Liquidación y Compensación y Agentes de Bolsa. En contraste, el dólar paralelo opera en un mercado marginal y poco regulado.

En su análisis de Funes reconoció que “no existe una explicación única para estos movimientos en el mercado del dólar, pero enfatiza la importancia de mantener la calma”. En ese sentido manifestó: “Para las pequeñas y medianas empresas que dependen de importaciones para mantener su producción, el acuerdo de Swap con China representa una ventaja en el corto y mediano plazo”. Sin embargo, para los ahorristas minoritarios que dudan acerca de qué hacer con sus pesos, esta situación es una llamada de atención. El equilibrio en la cotización del dólar experimentó cambios significativos, y es esencial considerar las opciones con prudencia.

En relación a los ahorristas que optaron por no renovar sus plazos fijos por temor a una devaluación posterior a las elecciones, pero mantuvieron sus pesos en cuentas corrientes, Funes prefirió ser cauteloso y explicó: “La tasa de interés de los plazos fijos se ha ajustado al 133% anual, lo que representa una tasa efectiva mensual del 11%. Si esta tasa se mantuviera durante todo el año, se traduciría en un rendimiento anual del 253%, superando las estimaciones inflacionarias. No obstante, las decisiones de inversión deben considerarse cuidadosamente en función de la evolución del dólar y se recomienda asesorarse adecuadamente”.

El especialista en Finanzas también marcó que para el 2024 hay señales de mejora en la economía en términos de reservas, relacionadas con la disminución de la sequía y la finalización de proyectos de ahorro energético, como el gasoducto. “Estos indicadores sugieren un contexto financiero más favorable para el próximo año. Además, como es habitual, los resultados electorales tendrán un impacto en los mercados financieros, tanto al alza como a la baja, y es fundamental tener en cuenta las posturas de los partidos con posibilidades de ganar las elecciones presidenciales que se llevarán a cabo el 22 de octubre”, enfatizó.