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La industria pyme cerró 2024 con una caída del 9,8% y marcó un repunte aislado en diciembre

Según un informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came), el sector pyme registró una leve recuperación en diciembre, pero acumuló una caída anual significativa. Desde Apyme advirtieron sobre las dificultades estructurales y el impacto del modelo económico del gobierno nacional en el mercado interno

La industria pyme culminó 2024 con una caída acumulada del 9,8% respecto a 2023, según un informe elaborado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came). A pesar de un repunte del 7,3% interanual registrado en diciembre, los empresarios advierten que la situación sigue siendo crítica, con altos costos de producción, baja demanda interna y competencia desleal en el mercado global.

En diálogo con La Marca de la Almohada, el secretario general de Apyme, Juan José Sisca, afirmó: “El 2024 fue un año muy malo en función de un modelo económico que no contempla ni a las pymes, ni a la producción nacional ni a los trabajadores”. Según el dirigente, las políticas implementadas perjudicaron al mercado interno, principal destinatario de los productos y servicios generados por las pymes.

El informe de Came detalla que en diciembre todos los sectores presentaron variaciones interanuales positivas, destacándose los rubros Maderas y muebles (18,1%), Textiles e indumentarias (12,4%) y Químicos y plásticos (9,2%). Sin embargo, en el acumulado anual, los mismos sectores mostraron caídas importantes, al igual que Alimentos y bebidas (12,3%) y Papel e impresiones (11,1%).

Sisca subrayó que “el 89,9% del crecimiento responde a la molienda de soja y granos”. Este dato, según explicó, genera una distorsión en el promedio de recuperación, ya que no refleja la realidad de la mayoría de los rubros que dependen de la demanda interna.

En términos de uso de capacidad instalada, el promedio de diciembre fue del 62%, marcando una baja de un punto respecto a noviembre. Sectores como el metal mostraron una leve recuperación del 5,2% interanual en diciembre, pero cerraron el año con una caída acumulada del 9,4%. “Muchas fábricas otorgaron licencias durante las fiestas para reducir costos, pero enfrentan problemas como la competencia de precios internacionales y la dificultad para retener personal calificado”, detalla el informe.

El contexto de incertidumbre política y económica también afectó el consumo, particularmente hacia finales de 2023. Sisca señaló que “la moderación en los niveles de compra fue producto de la incertidumbre ante la asunción de un nuevo gobierno que anunció la desregulación de varios sectores”. Según el dirigente, este impacto fue especialmente fuerte en Rosario y su región, que depende en gran medida de la actividad industrial.

El estudio de Came relevó además las demandas prioritarias del sector pyme: el 64,9% de los empresarios encuestados considera que la reducción de impuestos sería la medida más efectiva para revertir la situación, seguida por el estímulo a la demanda interna (11,2%) y la simplificación burocrática (8,5%).

“La competencia internacional para Argentina es imposible”, sostuvo Sisca, haciendo hincapié en los altos costos de insumos dolarizados y la apertura de importaciones. Según el dirigente, estas condiciones generan un escenario desfavorable para las pequeñas y medianas empresas, mientras que el modelo económico actual beneficia a sectores concentrados como la energía y la minería.

En cuanto a las medidas adoptadas por las pymes para enfrentar la crisis, el 32,9% diversificó su oferta de productos y el 21,6% optó por reducir gastos operativos. No obstante, muchas empresas informaron que paralizaron su producción durante diciembre y enero, en algunos casos debido al exceso de stock acumulado.

Sisca concluyó que las perspectivas para 2025 son desfavorables. “En los últimos meses se tomaron medidas que favorecen a la importación de productos con mano de obra extranjera, lo que va en detrimento de los productos nacionales”, advirtió. Para revertir esta situación, Apyme insiste en la necesidad de un modelo económico que priorice la producción nacional y el mercado interno.