El concejal Carlos Cardozo presentó una iniciativa para adherir a un decreto nacional que legalizaría Uber, Didi y remises informales, además de permitir el ingreso de combis interurbanas al sistema de transporte local. La propuesta busca abrir un debate sobre las posibilidades de desregulación y su impacto en la movilidad urbana

El concejal Carlos Cardozo, del PRO, presentó en el Concejo de Rosario un proyecto para adherir a la resolución 57/2024 de la Secretaría de Transporte de la Nación, la cual establece la desregulación de los servicios de transporte de pasajeros en viajes urbanos, interurbanos e interjurisdiccionales. Según el edil, esta medida permitiría legalizar aplicaciones como Uber y Didi, además de los llamados “remises truchos”, ofreciendo nuevas opciones de movilidad en la ciudad.
La resolución 57/2024, aprobada el 9 de diciembre pasado, reglamentó decretos que impulsan la liberalización del transporte en Argentina. Esto incluye la posibilidad de que cualquier persona con licencia de conducir y un vehículo habilitado pueda operar como prestador de servicios de transporte, sin necesidad de cumplir con las exigencias tradicionales del sector.
En diálogo con La Marca de la Almohada, Cardozo explicó que su iniciativa busca actualizar el marco regulatorio de Rosario acorde a la nueva normativa nacional. “El proyecto tiene que ver con el debate sobre las aplicaciones que, tras años de rechazo, ahora son aceptadas en Rosario. Proponemos abrir el debate tanto en el Concejo como en la legislatura provincial para discutir las condiciones de adhesión al decreto nacional”, señaló.
El edil también planteó la posibilidad de permitir la circulación de combis interurbanas, un modelo que ha ganado popularidad en otros países de Latinoamérica. Según Cardozo, esto ofrecería una alternativa más rápida y económica para quienes viven en las afueras de Rosario y necesitan trasladarse a la ciudad diariamente.
“Abriendo posibilidades de desregulación, le daríamos mejores opciones de traslado a la gente y aliviaríamos al sistema de transporte urbano de pasajeros. El sistema interurbano actual es malo, caro y deficiente”, sostuvo.
Otro punto polémico del proyecto es la propuesta de otorgar un marco legal a los remises informales, conocidos como “truchos”, que operan en Rosario desde hace décadas. Cardozo argumentó que esta medida permitiría regularizar un fenómeno existente, garantizando estándares mínimos de seguridad y control.
El proyecto generó reacciones encontradas entre los distintos sectores del transporte y la ciudadanía. Por un lado, algunos destacan la posibilidad de generar empleo y mejorar la competitividad del sistema. Por otro, existen preocupaciones sobre el impacto que la desregulación podría tener en los taxis, remises legales y el transporte público tradicional.
La propuesta de Cardozo no solo abre un debate sobre la desregulación del transporte, sino también sobre la modernización y sostenibilidad del sistema de movilidad urbana en Rosario. “Es momento de avanzar en nuevas opciones de transporte que beneficien a los ciudadanos, siempre garantizando estándares de seguridad y eficiencia”, concluyó Cardozo.