La Licenciatura en Comunicación Social cumplió medio siglo en la UNR y en la Tertulia de Viernes diversas generaciones de sus actores pasaron por el estudio de Radio UNR para realizar un recorrido por la historia de la carrera y contar como fue transitar la dictadura y el nuevo tiempo de la democracia, la irrupción de internet, el pasaje de lo analógico a lo tecnológico y la incidencia de las redes sociales, todo pasó en estos últimos 50 años y en dos horas de aire.
Participaron de esta tertulia: Néstor Taborda, director de la Escuela de Comunicación Social de la UNR; Sandra Valdettaro, Miembros del Centro de Investigaciones en Mediatizaciones. Doctora y Licenciada en Comunicación por la UNR, Master en Ciencias Sociales por FLACSO; Susana Frutos, ex directora, docente y una de las mentoras de la carrera; Carlos Colombo, comunicador social en ejercicio del periodismo; Carina Bazzoni, Lic en Comunicación social y periodista y Stefanía Sahakian, Lic. en Comunicación Social, docente universitaria y especialista en comunicación digital.
Carlos Colombo dijo que el inicio de la carrera de Comunicación Social en Rosario “fue un hecho histórico” porque según comentó “la primera vez que una carrera se cerró en la una universidad privada y se abrió inmediatamente en la universidad pública”.
En este sentido Susana Frutos dijo que junto a Víctor Aliprandi le tocó hacer “ese movimiento tan difícil de traer a la gente que venía de la privada a la nueva carrera estatal. Fui muy feliz pero en una época terrible, yo termine exiliada finalmente, pero tuve un tiempo para poner eso en marcha y lo recuerdo con mucho cariño”.
En el relato Frutos nos dejó algo por el cual periodistas corren casi toda su vida, una primicia. “Fueron épocas lindas pero también muy difíciles vinculadas a la violencia. Tenemos que escribir esta historia. En el momento en que intentamos llevarla desde la Facultad de Humanidades y Artes, porque nos decían que éramos los parias y que no teníamos lugar ahí, a la Facultad de Derecho y fue entonces en que fui amenazada de muerte, me decían que era muy joven para esto y que todo esto me iba a hacer muy mal; terminé en el exilio”.
Al regresar formó también parte de la “primavera democrática” en la Escuela de Comunicación Social y elogió a Eliseo Verón como “quien diseñó nuestro plan de estudio” así como a Lucrecia Escudero quien “trabajó mucho para nuestra carrera a través de un Seminario Internacional, el único en Argentina en ese momento y que duró dos años”.
En esos nuevos tiempos de la democracia luego de 1983 Colombo dijo que en ese momento “definimos el perfil del nuevo comunicador. Era un momento impresionante porque nos comíamos el mundo y había todo por hacer. Susana llega con los exiliados y eran docentes a los que valían la pena decirles así”, mencionó; mientras Sandra Valdettaro dijo que como estudiante y luego graduada “viví el plan de la dictadura que era horroroso, insustancial y sin contenidos; mi formación fue la de posgrado con FLACSO”.
Para la intelectual “la recuperación democrática, que fue muy apasionante e intensa, y a partir de la gestión de Susana Frutos se le inyectó una impronta que se distingue por la cuestión teórica y epistemológica construyendo una base académica muy importante. Esa conjunción entre lo que era una mirada teórica muy centrada en la especificidad de los lenguajes”.
Para Valdettaro “en comunicación hay algo de la tribu, tenemos una cosa de cosmopolita con estudios latinoamericanos, el debate europeo continental y un entusiasmo impresionante así como el tribalismo y la concepción de las prácticas que se pensaban como experiencias con los lenguajes y las tecnologías. Tuvimos un plan de 1986 muy potente”.
Allí “la carrera estalló”, dijo Valdettaro quien definió ese momento como “el fundacional del programa académico” y analiza que luego “la reforma de 2001 quiso incorporar las problemáticas del momento con una versión más problemática, había necesidad de hacer interdisciplina y creo que algunas disciplinas se diluyeron y ahora estamos ante un gran desafío que es incorporar a lógicas globales de tiempos de graduación, pero conservando la cuestión crítica de formación”.
PODES ESCUCHAR LA TERTULIA DE VIERNES AQUÍ:
En este sentido Néstor Taborda, actual director de la carrera manifestó que “el vínculo entre el grado y el posgrado es fundamental y la necesidad de actualizar los tiempo también e incluso ya hay normativas de la UNR, para el nuevo plan de estudio que tiene que ser de cuatro años y agregar las prácticas educativas curricularizadas. La tendencia mundial son ciclos de materias cuatrimestrales cuando aquí son casi todas anuales; son situaciones que deberemos acomodar y todo en un año muy difícil con el ataque del gobierno nacional contra la universidad”.
Por su parte Carina Bazzoni contó que su entrada a Comunicación Social fue con el “inicio de los ingresos masivos a la carrera: Momentos en que si no ibas 40 minutos antes a una clase no entrabas al aula y las clases se daban con las puertas abiertas y los salones llenos”
Al mismo tiempo “eran momentos de formación en dónde no se aprendía solo en las aulas, sino también en el bar, en los pasillos y las experiencias de docentes y compañeros” aunque “era difícil explicarles a tu papá y tu mamá qué era lo que estudiábamos”.
Mientras que Stefanía Sahakian, quien ingresó a estudiar en 2003 formó poarte de la “generación bisagra entre lo analógico y lo digital, en ese momento apareció Facebook y estuvimos estudiando en esa transición”.
Hoy Sahakian es docente de Epistemología y para ella es muy importante “recuperar el tema de la militancia docente. Si hay algo hermoso es cuando los docentes te marcan, te dan lugar y te forman. Quienes pudimos integrarnos tratamos de recuperar eso todo el tiempo”, afirma.
“Esta vocación de ir y no solo contar y pasar conocimiento sino comprometerse con la enseñanza y con los estudiantes”, dijo.
Frases tertulianas:
“La comunicación hoy es un derecho, es tan importante como el agua”. (Carlos Colombo)
“La carrera de Comunicación Social tiene que ser un polo de producción de conocimiento crítico” (Sandra Valdettaro)
“En los medios ya está todo hecho, después va variando la cosa. Esto que es la radio sigue siendo un relato y si no hay, no hay comunicación; y si no hay algo que se está escribiendo, no hay comunicación; y si no hay cámara y micrófono, no hay televisión que comunica. Porque en definitiva lo que sigue habiendo en la comunicación y los medios es un relato”. (Carlos Colombo)
“La carrera está muy atravesada por la cuestión política transformadora como comunidad, el derecho a la comunicación y la universidad pública. Existe un prestigio teórico que tiene la carrera pero que no impide que el mundo de las ideas esté disociado de la práctica. Eso lo tenemos muy claro y es un rasgo de nuestra comunidad educativa”. (Néstor Taborda)
“La función de la comunicación en la sociedad es bajar la complejidad en comunidades cada vez más complicadas, que la sociedad se puede comunicar a si misma cosa que está en riesgo. El periodismo tiene que construir un relato que son maneras de entender la cultura, los vínculos y los lazos sociales y después hay otros actores comunicativos además de los medios. Estamos en un momento mucho más complejo en donde los medios de comunicación tradicionales siguen siendo instituciones y las redes sociales y plataformas son desinstitucionales porque en estos lugares hay muchos flujos destituyentes”. (Sandra Valdettaro)
“Trabajando en los medios entramos en contradicciones con las cosas que leemos en la facultad y seguimos leyendo. Me parece que esto también enriquece la posibilidad de reflexionar la práctica periodística”. (Carina Bazzoni)
“Parece que una cosa es ser comunicador y otra ser periodista” (Susana Frutos)
“Los medios de comunicación no querían comunicadores sino periodistas, pero con el tiempo se fueron dando cuenta que se debía profesionalizar al periodismo”. (Carlos Colombo)
“El modo en que hacemos la comunicación es un estilo de vida y la universidad es un estilo de vida y esto hay que defenderlo siempre”. (Sandra Valdettaro)
“Cuando nos graduamos pusimos un cartel que decía ‘No somos periodistas, somos comunicadores’”. (Stefanía Sahakian)