El secretario general del gremio de judiciales, Juan Pablo Langella, expresó su rechazo a la reforma previsional promovida por el gobernador Maximiliano Pullaro, asegurando que la medida es un ataque directo a los derechos de los trabajadores y denunció la falta de diálogo por parte del gobierno provincial
El gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, defendió la reforma previsional propuesta por su administración, en medio de un fuerte rechazo por parte de distintos sectores, especialmente del Poder Judicial. Durante una reciente declaración, Pullaro se dirigió directamente a los jueces, quienes manifestaron su oposición a la medida con una concentración en los tribunales de Rosario. “Lo que hago es terminar con todos los privilegios, principalmente de los que más ganan y de aquellos que se creían que tenían coronita en la provincia de Santa Fe, que son los jueces y es el Poder Judicial”, aseguró.
La respuesta no se hizo esperar. Juan Pablo Langella, secretario general del Sindicato de Trabajadores Judiciales de Santa Fe, expresó su descontento con las palabras del gobernador y con la reforma en sí. “Nos encontramos con una agresión inédita por parte del gobierno provincial”, afirmó Langella, quien destacó que la reforma perjudica directamente a los derechos de los trabajadores, tanto activos como jubilados.
En diálogo con La Marca de la Almohada, Langella también cuestionó el proceso por el cual se llevó adelante la reforma, señalando la falta de diálogo con los gremios afectados. “Este proyecto no se habilitó la escucha de los diferentes gremios. Todos los sindicatos de la provincia hicimos un planteo por escrito con los puntos críticos, pero el gobernador no tomó en cuenta nada de lo que dijimos. La convocatoria al diálogo fue una pantomima”, criticó, subrayando la frustración del sector por no haber sido escuchados en un tema tan sensible.
Entre los puntos más controvertidos de la reforma se encuentran la postergación de los incrementos en las jubilaciones por 120 días y la restricción del derecho a la pensión. Langella advirtió que estas medidas tendrán un impacto negativo en los trabajadores. “No estamos de acuerdo con la reforma previsional porque es meterle la mano en el bolsillo a los trabajadores activos y pasivos. Con los cambios que se proponen, se va a matar el 82% móvil y se verán afectadas las pensiones, un perjuicio tétrico”, comentó.
El líder gremial también mencionó que esta reforma parece estar alineada con políticas nacionales que perjudican a los trabajadores, refiriéndose al Pacto de Mayo, que según él, tiene un enfoque desfavorable para los empleados públicos. “Vemos que el gobierno provincial, suscribiendo al Pacto de Mayo, se allana a una política nacional peyorativa, despectiva, y donde se le mete la mano en el bolsillo a los activos, pasivos y servidores públicos que han contribuido con el sostenimiento de la Caja”, afirmó.
A pesar de las garantías de Pullaro de que “no se va a recortar el 82% móvil”, Langella mostró su escepticismo, argumentando que las medidas propuestas van en contra de esta promesa. “Nos han dicho que no van a tocar el 82% móvil, pero las medidas que proponen claramente van en esa dirección. Es un ataque directo a los derechos de los trabajadores”, sostuvo, mostrando su preocupación por las posibles consecuencias de la reforma.
La tensión entre el gobierno provincial y los trabajadores judiciales ha ido en aumento, con movilizaciones y protestas previstas para los próximos días. “Desde el año pasado, hay propuestas de ingresos al Poder Judicial que están suspendidos. Por eso, mañana jueves vamos a movilizarnos y a presentar un reclamo formal”, adelantó Langella, anticipando una escalada en las acciones de rechazo a la reforma.