El Centro de Economía Política Argentina (CEPA) reportó un alarmante incremento en despidos y suspensiones en el primer semestre de 2024, destacando el impacto en los sectores de construcción e industria
El Centro de Economía Política Argentina (CEPA) presentó un informe revelador sobre la situación de los despidos y suspensiones en Argentina durante los primeros seis meses del gobierno de Javier Milei. Según el informe, el país ha experimentado una preocupante pérdida de 177 mil puestos de trabajo, afectando tanto al sector privado como al público.
De acuerdo con las estadísticas del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), entre noviembre de 2023 y abril de 2024 se perdieron 111.656 empleos asalariados en el sector privado. Para mayo, la Encuesta de Indicadores Laborales proyectó una nueva caída de 18.111 puestos. El análisis de CEPA indica que los despidos y suspensiones fueron mayormente impulsados por el sector de la construcción, que representa el 56,29% del total, seguido por la industria con el 42,95%. El sector de servicios, por otro lado, mostró un impacto mínimo, con solo el 0,76% de los casos.
El informe distingue entre despidos y suspensiones, señalando que la mayoría corresponde a despidos (167.205), mientras que las suspensiones, licencias y retiros voluntarios suman 10.452 casos. Es importante destacar que la gran mayoría de los despidos (166.870) no se debieron al cierre de sucursales o empresas, sino a una reducción de personal. Solo el 0,2% de los casos (335) fueron causados por cierres definitivos.
En el sector público, CEPA identificó 29.604 desvinculaciones, principalmente en el Estado Nacional, incluyendo tanto la Administración Central como Empresas de Capital Estatal como Correo Argentino y Radio y Televisión Argentina SE.
Aldana Denis, economista del CEPA, conversó con La Marca de la Almohada para profundizar en los detalles del informe. Denis destacó que “el informe plasma varios casos que vienen de un relevamiento de despidos y suspensiones del sector privado y público, con 177 mil casos, de los cuales la mayoría provienen del rubro de la construcción, debido a la paralización de la obra pública. Otro 43% se refiere a la industria, que atraviesa una grave crisis”.
Denis también mencionó casos específicos como “las paradas de plantas de Acindar y la que llevará a cabo la planta Canale en Mendoza, que contribuyen a los datos presentados en el informe. Hay plantas que ya redujeron sus producciones y anuncian más recortes para el segundo semestre. Las que menos sufren el impacto son las vinculadas a la industria alimentaria, pero en empresas que se dedican a producir para la construcción, la caída se siente fuerte”.
Finalmente, Denis advirtió sobre el impacto en el consumo: “El consumo sigue cayendo en picada y se profundiza con la masa de trabajadores que dejan de percibir un salario o ven reducido su ingreso. No se vislumbran mejoras en el corto plazo”.