El productor, escritor y ex dirigente de Federación Agraria aseguró que sacar el tributo por completo sólo beneficia “a los grandes terratenientes y a los trasnacionales”.
El productor agrícola, escritor y ex dirigente de Federación Agraria, Pedro Peretti, insistió con su idea de aplicar retenciones segmentadas al campo y opinó que la postura del gobernador santafesino Maximiliano Pullaro y de otros dirigentes para que no haya impuestos “no está defendiendo a la producción ni a los productores”, si no que beneficia “a la oligarquía terrateniente y a las grandes trasnacionales”.
“La única manera de defender a los productores y a la producción, en materia de retenciones, es una sola: con retenciones segmentadas. El que más tiene, más tiene que pagar. Lo demás es fulbito para la tribuna. Es la única posta que hay”, aseguró Peretti en diálogo con La Marca de la Almohada.
“Soy partidario de retenciones segmentadas. Pequeños productores, cero. Grandes productores tienen que pagar más retenciones. Eso es lo que marca el manual de justicia tributaria. Eso debería reivindicar el peronismo. Salir del lugar en el que está escondido y reivindicar las posiciones históricas que tuvo en materia agropecuaria, que es la defensa de los sectores más débiles y no de los más poderosos. El peronismo en los últimos cinco años se la pasó bajando retenciones”, criticó Peretti.
El productor pidió tomar el ejemplo aplicado en 2015, durante la última presidencia de Cristina Krichner, cuando junto al por entonces ministro de Economía Axel Kicillof segmentaron las retenciones y le devolvieron tributos a 69 mil pequeños y medianos productores. “Eso es lo que tienen que hacer. Esto está marcado en la historia. Esperemos que el peronismo en algún momento se ponga los pantalones largos y recupere su propia historia”, insistió.
El ex dirigente de FAA sugirió políticas públicas diferenciadas en materia de exportaciones porque, dijo, “es mentira” que sacar retenciones mejora la calidad de los productores.
“Eso va a los grupos más concentrados. Te saco retenciones a la soja y no queda más un productor pequeño y mediano. Eso va al bolsillo de los que la juntan con la pala y con esa liquidez salen a alquilar más campos. La tierra es un bien finito. No se puede comprar una máquina y fabricar más tierra. Hay 38 millones de hectáreas, donde están los grandes y los chicos. Si al grande lo monetizás, le ponés plata en el bolsillo, va sobre el más chico. Es más sencillo que caminar”, advirtió.
Respecto del escenario económico que plantea el Gobierno nacional, con alta inflación, devaluación de la moneda y la posibilidad de una cosecha récord para acumular dólares, Peretti aseguró que “eso significa un desastre” porque “la gente se va a cagar de hambre”.
“No hay manera de disfrazarlo. Toda devaluación es una transferencia de los sectores de ingresos fijos a los exportadores. Es una regla matemática. Todo lo que se mueva en materia de combustible y de tarifas, y que se devalue, va al precio de alimentos en forma matemática. Acá hay una inflación del 20 por ciento arriba para varios meses, que es otro delirio de este país. Hace menos de treinta días con el 12,5 de inflación nos queríamos suicidar colectivamente. Y resulta que ahora el 25 es un éxito. Estamos todos muy mal”, criticó.
Por último, y en cuanto a las modificaciones que impulsa el Gobierno para la compra y venta de tierras, Peretti dijo estar en contra, pero aclaró que es necesario un debate porque “el latifundio es malo per sé, sea argentino o inglés”.
“No cambia mucho que más de 420 mil hectáreas sean de Jorge Brito, de Eduardo Eurnekian o de Joe Lewis. En este momento se está formando una nueva oligarquía terrateniente que se funda a partir y en el lugar donde se desmonta. Eso vienen haciendo Macri, Elsztain, Peña Braun, Olmedo, Brito. Todo los que vienen deforestando en el norte. Eso es tremendamente malo para la Argentina. Y la Ley Ómnibus, que permite seguir deforestando, es una ley de fomento a la oligarquía terrateniente argentina”, concluyó.