A medida que los primeros contratos bajo la Ley de Alquileres se acercan a su vencimiento, los inquilinos expresan su creciente preocupación por el aumento de los precios y la disminución de la oferta de viviendas

En medio de los tres años de vigencia de la Ley de Alquileres, Emmanuel Canelli, presidente de la Asociación de Inquilinos de la ciudad, reflexionó en La Marca de la Almohada sobre los resultados obtenidos hasta el momento. Si bien consideró que la ley ha sido un punto de partida necesario, destacó la existencia de ciertos puntos débiles que deben ser abordados.

Uno de los aspectos que Canelli señaló fue el plazo de 36 meses de duración de los contratos, el cual brindaba libertad de mercado para establecer los precios de alquiler. Durante la pandemia, el gobierno emitió un decreto que prohibía los desalojos y prorrogaba los contratos, pero al finalizar dicha medida, se observaron incrementos significativos en los valores de los alquileres. En sentido Canelli señaló: “Los propietarios justificaron estos aumentos argumentando pérdidas económicas”.

Sin embargo, también destacó una desaceleración en los precios de alquiler a lo largo del tiempo. Mientras que en 2022 las actualizaciones rondaban el 170%, en el presente año ese número se encontraba alrededor del 100% de incremento anual. Canelli atribuyó esta desaceleración a diversos factores, entre ellos la especulación financiera y la disponibilidad de inmuebles en el mercado. A medida que algunos contratos finalizaban, los propietarios optaban por poner nuevamente las viviendas en alquiler o ponerlas a la venta, generando un porcentaje de inmuebles ociosos que oscilaba entre el 15% y el 20%.

El presidente de la Asociación de Inquilinos destacó que, con un 80% de los inmuebles en rotación de alquiler, la demanda se encontraba satisfecha, lo que había contribuido a la disminución de los incrementos interanuales en los precios.

En cuanto a la necesidad de una nueva ley o de retocar la actual, Canelli manifestó: “A nivel provincial hemos acompañado iniciativas de legislación en Santa Fe pero no se ha conseguido siquiera dictamen en ciertos casos, como puede ser respecto a la comisión inmobiliaria, quién la paga, cómo y cuándo. Por lo que no se ha avanzado”.

“A nivel nacional hubo debates se llegó a dictámenes, que contemplan la vuelta de contratos a 2 años, con ajustes trimestrales ajustados a inflación, lo cual sería horroroso, pero además, la cuenta era sobre el último valor abonado lo cual era descabellado. Desde el oficialismo la propuesta fue promover la oferta de inmuebles con beneficios fiscales. Ninguno llegó a ser tratado en el recinto y esperamos que este año electoral se logre debatir pensando en el bolsillo de los que no tienen techo propio y menos recursos disponen”, enfatizó Canelli.

“La realidad es que en un panorama actual de crisis económica, genera que los trabajadores que son la mayoría de los inquilinos, destinen todos sus ingresos en un alquiler y en completar una canasta básica”, concluyó Canelli.