Lo afirmó la diputada del GEN, tras la pérdida de una gran cantidad de vacunas en el efector público del barrio 7 de Septiembre a causa de una heladera en mal estado
La diputada socialista, Mónica Peralta, denunció que en el efector provincial ubicado en Estrada al 8000, en la zona noroeste de Rosario, se echaron a perder una gran cantidad de vacunas porque una de las heladeras que las conserva está rota hace 20 días y aún no fue repuesta. En diálogo con La Marca de la Almohada expresó: “Estamos hablando de un contexto donde todavía hay vacunación para el Covid, para los ingresos escolares, más las vacunas de rigor”.
“Es parte de lo que viene sucediendo con los centros de salud que dependen del Ministerio de Salud de la provincia. Cada vez están más devastados, no solamente la ausencia de personal, sino también de insumos, de recursos para el personal que está trabajando para tratar de garantizar una buena atención a los vecinos y las vecinas de la ciudad”, afirmó Peralta.
Al respecto, también explicó que “es una parte de lo que viene ocurriendo en los efectores de salud, donde algunos están completamente cerrados, como el centro de Empalme Graneros” y que es el Ministerio quien debe dar respuestas porque “estos centros de salud no tienen inversión desde hace ya algunos años, y el estado de deterioro y abandono es algo que se fue dando de forma progresiva”.
Además, agregó que es el mismo personal quien muchas veces provee a los centros de salud de “insumos básicos, desde guantes a jeringas”, por lo que no tiene que ver solamente con gastos corrientes: “Tiene que ver con una cuestión de transferencia de recursos y de no inversión también”.
En cuanto a los vecinos, señaló que “apoyan al personal que está trabajando pero también se dan cuenta de que van a los horarios estipulados y muchas veces están cerrados, o se van antes de tiempo, o los días de paro de colectivo los centros de salud no abren”.