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Sufriendo, ganando y entre los 4 mejores

Por Federico Saenz

El mundial de futbol Qatar 2022 entró en zona de definiciones, los cuatro semi-finalistas ya están apostados a la espera del partido que los deposite en la ansiada final del próximo domingo. Francia, Marruecos, Croacia y por supuesto Argentina están en la ante sala de la definición por la gloria eterna.

El combinado nacional se ganó su lugar en semi-finales después de derrotar a Países Bajos, por penales, el pasado viernes en un partido, que como se suele decir en la jerga futbolística, tuvo de todo. La previa ya venía picante después de las declaraciones del técnico rival, Louis Van Gaal. El partido fue emocionante, tuvo un golazo de argentina después de una jugada “exquisita” de Messi que incluyo un pase sin mirar para que Molina marcara el 1-0, hubo un gol de penal convertido por Messi con festejo de Topo Gigio incluido frente al banco rival y cuando parecía que el partido terminaba 2-1 a el árbitro le pareció bien adicionar 10 minutos, SI 10 MINUTOS, y fue que sobre el final de la adición los ex holandeses encontraron el empate que mandó el partido al alargue.

El tiempo extra fue un monologo del elenco nacional que no lo pudo traducir en goles así que tuvimos penales para ponerle aún más emoción al partido. El arquero argentino fue la gran figura después de atajar las dos primeras ejecuciones de los naranjas, por su parte Messi, Paredes y Montiel convirtieron, solo falló Enzo Fernández para que en el quinto y definitivo penal Lautaro Martínez hiciera delirar a los jugadores, al cuerpo técnico, a los hinchas que estaban en el estadio y en las calles de Doha y a todo un país que se paraliza cada vez que juega está selección.

Con la victoria consumada y el festejo alocado adentro de la cancha, que incluyo alguna cargada y/o recriminación por parte de los jugadores argentinos hacia los europeos, vimos a Messi en lo que se podría decir su estado más “marodoneano”, si se me permite la expresión, se arrimó al banco rival y le hizo algún que otro gesto al técnico rival que miraba con cara de no entender que sucedía, pero esto no sería lo único que el capitán haría post partido, cuando le toco hablar ante los micrófonos de la prensa se lo pudo ver disgustado con el árbitro y con quien lo designa, la FIFA y también se cruzó con un rival al que le dijo la frase que recorrió el mundo “que miras, bobo. Anda para allá”.

Todo esto ya es una anécdota y ahora todo se resume al partido del próximo martes a las 16 horas versus Croacia, que viene de dejar afuera uno de los cucos de este mundial, Brasil. La otra semi-final será Francia, que le ganó a Inglaterra, contra la sorpresa de este mundial, Marruecos que dejó afuera a la Portugal de Cristiano Ronaldo.

En resumen, Argentina, sufre, gana y se ilusiona de la mano de un Lionel Messi total, en estado puro y maradoneano.