Lo afirmó la exinterventora de la AFI y exfiscal argentina
Cristina Caamaño, exinterventora de Agencia Federal de Inteligencia (AFI) y exfiscal argentina, confirmó que en el organismo se encontraron fotos de la líder de la Coalición Cívica ARI, Elisa Carrió, cuando se encontraba de viaje por Paraguay. La propia dirigente de Juntos por el Cambio había denunciado la situación en 2017, pero después dio marcha atrás. De esta forma, confirmó lo señalado el último fin de semana por la exdiputada nacional en el programa de Mirtha Legrand, cuando aseguró haber sido espiada por integrantes de su propio espacio político durante la gestión de Mauricio Macri.
“Esto no es algo novedoso. El macrismo vivió del espionaje ilegal desde siempre. Deberíamos acordarnos que el ex-presidente Macri asumió siendo procesado por espionaje ilegal y cuando asumió lo sobreseyeron”, expresó Caamaño en diálogo con Apuntes y Resumen.
Y añadió: Lo novedoso es que una persona como Lilita Carrió lo diga y siga perteneciendo a ese espacio político. Eso es lo que uno dice cómo puede ser, qué intereses hay en juego para que una persona que ha sido espiada, que dice que el daño que le ocasionaron a su familia es irreparable, siga perteneciendo a ese espacio”.
En esa línea, la exinterventora de AFI señaló: “Nosotres cuando llegamos a la agencia hicimos varias denuncias por espionaje ilegal. La primera fue por el espionaje a la actual vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de kirchner, en donde la siguieron tanto en su casa como en el instituto patria”.
Y aseveró: “Incluso quisieron poner una cámara en un poste de luz que enfocase adentro del departamento de la actual vicepresidenta, pero como era una zona muy transitada no se animaron, por eso empezaron a seguirla”.
En cuanto a las prácticas con las que se encontraron en la AFI, la exfiscal relató: “Llegaban los supuestos superagentes y lo que te contaban era que fulano fue a comer con mengano y se va a ir de tal partido para irse a otro, porque ese otro es de otro partido. O que alguien había hecho una pintada de blanco y rojo entonces se iba a pasar al radicalismo, era ese tipo de cosas”.
Y añadió: “O venían los genios del polígrafo para contarte que le aplicaban el polígrafo entre dos y tres veces por año a empleados rasos para ver si estaban fidelizados. Los hacían confesar cosas que no tenían nada que ver con la agencia. Yo lo prohibí con una resolución cuando ingresé en la agencia, no tiene ninguna base científica esa máquina. En la agencia pagaban 50 mil dólares para ir a capacitarse a Cancún, a ver. Eso era al AFI cuando llegué como interventora, una vergüenza”.
En cuanto a la función que deben cumplir las agencias de inteligencia, Caamaño afirmó: “Las agencias de inteligencia del mundo, sobretodo la más modernas, se ocupan de hacer inteligencia estratégica. Esto no es saber que desayuno hoy Rodríguez Larreta. Inteligencia estratégica principalmente es estar atento a que no haya un ataque terrorista, más en un país que tuvo 2 ataques terroristas, 3 si contamos el intento de atentado a la vicepresidenta”.
Y concluyó: “El lawfare se puede dar en cualquier lugar. Nosotros lo que estuvimos que limpiar fue la AFI con los agentes que estaban desparramados en las distintas provincias, pero después Defensa tiene su grupo de inteligencia, las Fuerzas de seguridad federales tienen su grupo de inteligencia, las policías provinciales tienen su grupo de inteligencia. Me parece que solo con la AFI no alcanza, cada uno debería poder hacer la misma limpieza, es decir, que la policía se dedique a los grupos criminales exclusivamente, no a hacer espionaje ilegal”.