En Apuntes y Resumen hubo debate sobre la situación económica del país con especialistas y actores sociales que se organizan para hacerle frente a la disparada de precios. 

Según el informe del Indec, la inflación mensual de diciembre fue del 5,1%. Con esa cifra, el aumento de precios acumulado fue el mayor en los últimos 31 años. Además, la inflación acumulada durante 2022 alcanzó el 94,8%, siendo la más alta desde 1991.

Lo que más aumentó en diciembre fue la categoría Restaurantes y hoteles (7,2%), seguida por Bebidas alcohólicas y tabaco (7,1%). Los combustibles movieron la suba en Transporte (5,8%), mientras que las alzas en Alimentos y bebidas no alcohólicas (4,7%) fueron la que más incidieron en la mayoría de las regiones. Se destacó el aumento de Frutas; Aguas minerales, bebidas gaseosas y jugos; Pan y cereales; y, en algunas de las regiones, Verduras, tubérculos y legumbres.

Es en ese marco que Apuntes y Resumen para la Tertulia de Viernes tomó como pregunta disparadora: ¿Cómo llegamos a fin de mes? 

En primer lugar, el economista Lavih Abraham clasificó como “complejo” al 2023 por tratarse de un año electoral y afirmó que en los últimos meses se pudo apreciar “una ordenación en el plano de lo fiscal”. Además señaló que la inflación fue el gran problema del 2022 pero que comenzó a descender paulatinamente en los últimos 3 meses del año.

“El gobierno parece que empieza a encontrarle la vuelta. De una inflación altísima que tuvimos el año pasado, no vamos a bajar a 0 inflación automáticamente. Va a bajar a 60 que es creíble”, expresó Abraham.

Por su parte, Juan Milito de la Unión Almaceneros de Rosario remarcó que no perciben que los índices de inflación hayan bajado y aseguró que se debe “atacar” en profundidad las causas del problema.

“Cuando digo atacar las causas, es que en Argentina hay alrededor de 15 empresas que son las formadoras de precios. En estos últimos dos meses estas empresas aumentaron los valores en forma muy importante. Veo que hay mucha gente del sector de la economía popular que son aparte de ferias, ellos compran en los negocios de barrio y lo pueden ver claramente”, manifestó Milito.

“Nosotros hacemos una medición de precios de referencia”, explicó Agustín Prospitti de la Usina de Datos UNR. En esa línea, aclaró que lo relatado por Juan Milito es “una foto mucho más real” de la situación y contó que la medición que ellos realizan es sobre los precios de una canasta básica que establece el INDEC, la cual abarca los productos que necesitaría una persona mayor de edad para poder cubrir sus necesidades básicas.

“Hay un elemento de esa canasta que tiene que ver con lo cultural, con lo que consumen los Argentinos. En eso no se calcula sólo fideos para comer durante un mes sino que esa canasta está compuesta por hábitos de consumo”, explicó Prospitti.

Y añadió: “Medimos las 5 cadenas de supermercados más grandes de Rosario y también los precios que publican los compañeros de Unión de Almaceneros en convenio con la Municipalidad. A nosotros los últimos 3 meses del año 2022 nos marca un descenso en los precios pero hay que remarcar que medimos los productos más bajos en precio que se encuentran en góndola”.

María Cáceres de la feria Popular de Maradona y Rouillón señaló que a ellos la situación económica “les toca un poco más” por tratarse de un sector muy vulnerable.

“La situación de nosotros se viene notando a partir de la segunda mitad del año pasado. Las ventas han aflojado mucho. Nosotros trabajamos mucho con los planes sociales, con asignaciones. La gente va a buscar los precios a la feria para llegar al mes. Los precios nuestros de la feria son todos precios populares, se puede comprar un poco más que en los negocios de barrio”, comentó Cáceres.

En ese marco, la emprendedora contó que la feria fue creada después del 2001 cuando ella y 3 mujeres más comenzaron a llevar adelante un emprendimiento de alimentos. Luego avanzó a la modalidad de trueque hasta que concluyó en lo que hoy es la feria.

“Nosotros no nos quedamos con la frase “los negros de mierda”. Así nos decían a nosotros y eso duele porque fuimos llamados así durante muchos años. Tenemos nuestro proyecto de salir adelante, todos tenemos nuestro negocio, seguimos con nuestro emprendimiento, es una fábrica con las puertas abiertas”, aseguró Cáceres

Finalmente, la directora de la Escuela de emprendedores, además de subsecretaria de Economía Social, Marta Sánchez, estableció que si bien hubo algunas leves mejorías en materia económica, clasificó a la realidad de la gente como “muy compleja” y remarcó que en una gran cantidad de casos no hay una elección de emprender por parte de la gente sino por necesidad.

“En muchos casos cuando surge alguna changuita abandonan el emprendimiento y se avocan a esa noción de empleo más estable. Nuestra experiencia desde Economía Social es que cada año atendemos a razón de 1500 emprendedores que transitan los programas educativos, donde tratamos que la gente pueda vivir mejor de su trabajo autogestivo”, expresó Sánchez.

Y concluyó “La inflación está golpeando mucho las economías familiares. Hemos empezado a notar desde hace unos años que las mujeres ocupan un rol muy protagónico en las ferias populares, le ponen el pecho a la crisis de todas las maneras que uno se imagina”.