El intendente de la ciudad de Rosario, apuntó a priorizar recursos, descartó un frente antiperonista para el 2023, y pronunció la necesidad de urbanizar los barrios más conflictivos.
El último año de la gestión de Pablo Javkin como intendente de la ciudad de Rosario, lo encuentra con escenario de estabilidad post pandemia, donde la inseguridad y la violencia urbana marcaron un hito en la ciudad el pasado 2022, con récord histórico de homicidios. En ese panorama, la llegada del Estado al territorio, la normalización del Sistema de Transporte, la urbanización y desarrollo de la ciudad y su futuro político a nivel provincial fueron parte de los temas que desarrolló en entrevista con Radio UNR.
En el inicio del 2023, Javkin dialogó con Pablo Feldman en Radio Universidad y allí no escapó a responder acerca de un posible armado político que pueda competir en las elecciones provinciales de este año. Allí se defendió de los rumores que lo involucran con alianzas políticas con los sectores más conservadores de Juntos por el Cambio. “Hay que descartar un frente antiperonista. En la provincia de Santa Fe lo que se debe organizar es un gobierno que tenga capacidad política de cambiar algunas cuestiones estructurales en Educación, Justicia y Seguridad que son claves para la vida cotidiana de los santafesinos”, expresó la máxima autoridad política de la ciudad.
Y agregó: “Estos fenómenos tan estructurales no lo sufren en mayor proporción la clase media o alta, sino los sectores más humildes de la provincia. Desde allí no me imagino un frente “anti”, sin sectores del peronismo y no veo un frente que no sea capaz de dialogar con los representantes de los trabajadores, y ese es el camino. Lo que está claro es que no pude hacer la oposición en Santa Fe es dividirse”.
En tanto sostuvo: “Desde mi punto de vista en la variable de disputa interna tiene que haber un peso mayor de las ciudades, que es por donde pasa la vida de la gente. A medida que escalas en los gobiernos menos noción ves sobre las ciudades, y es el debate que se viene”.
El entramado político de Santa Fe no escapa a la realidad que atraviesa el país en los últimos años, con una grieta política extremadamente marcada y el resurgir de algunos sectores muy radicalizados de la derecha con tintes antisistema. “Hay una lectura de la política argentina demasiado optimista en lo que puede llegar a pasar. No comprendo como en Argentina no creemos que vaya a pasar lo que sucede en todo el mundo. Existe un quiebre muy profundo y se muestra en la rotura de las sociedades”, enfatizó Javkin.
Y aseveró: “Al peronismo se la ha permitido todo en este país, y las lecturas sobre los supuesto posicionamientos de la oposición muestra que somos juzgados hasta con lupa. Nosotros vamos a participar de la elección con lo que somos y discutiremos sobre lo que se hace”.
Por otro lado el intendente no escapó a la realidad que atraviesa la ciudad, donde cumplió un infeliz récord de homicidios el pasado 2022 con 287 casos, superando al 2013. Allí el líder del ejecutivo local apuntó a la urbanización y al destino de recursos para reestablecer el Sistema de Transporte pre pandemia, impulsar la obra pública y la transformación urbana de barrios populares.
En ese orden, Javkin se refirió a un caso emblemático de los últimos meses con la construcción de una torre de lujo sobre las orillas del Paraná en la zona de Puerto Norte. “El Estado deber priorizar los recursos. Sancor Seguros propone una torre en zona de Puerto Norte, con una inversión de 120 millones de dólares, y existe algunos sectores que se llaman progresistas que se oponen por la altura y para preservar un silo”, expresó.
Y enfatizó: “El gran luchador y al que le debemos la lucha contra las cerealeras, cuando 20 años atrás era Refinería foco de violencia y homicidios, fue Hermes Binner. Las primeras edificaciones donde había cerealeras y se las cambió por urbanización en altura durante el gobierno de Binner. De esa torre 6,5 millones de dólares de la renta de urbanización van a barrios populares. El conservadurismo genera desigualdad”.
En ese sentido profundizó su visión en aquello que sucede en las diferentes barrios y cómo la llegada del Estado a dichos sectores resultan para transformarlos. “Debemos retomar la agenda de Binner, y ver cómo nivelas el piso del que vive dentro de unos de los 120 barrios populares y el que no, porque es allí donde la violencia se mete”, exclamó.
En tanto agregó: “En Vía Honda se dan el mayor porcentaje de los homicidios, y esto sucede porque no se puede entrar. El urbanismo no termina con el narcotráfico, pero termina con las oportunidades de las bandas de enquistarse en esos lugares”.
Y concluyó: “Hablemos del territorio, basta del verso teórico. El Estado se corrió de gran parte de la vida de mucha gente. Estamos tan mal que si no les das los tiempos suficientes a los acuerdos del Estado para que se sostengan, van a ganar las opciones que sostienen que el Estado no les da nada”.