Será a través del programa “Puente al Empleo”, que entra en vigencia a partir de octubre

Desde octurbe entrará en vigencia el programa “Puente al Empleo”, por el cual el gobierno nacional aspira a “incorporar a 200 mil trabajadores de la economía social” al mercado laboral formal.

De acuerdo a lo establecido en la creación del mismo, los empleadores del sector privado que contraten nuevos trabajadores que participen en los programas sociales, educativos o de empleo lo harán por un plazo de 12 meses.

Mónica Crespo de la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular, dialogó con La Marca de la Almohada acerca de lo establecido por el Ejecutivo nacional y puso reparos acerca de la implementación del plan. 

La iniciativa, que consta de 20 artículos y entrará en vigencia el 1 de octubre, fue publicada en el Boletín Oficial a través del decreto 551/2022, firmado por el presidente Alberto Fernández, el jefe de Gabinete, Juan Manzur; y los ministros Sergio Massa (Economía), Claudio Moroni (Trabajo) y Juan Zabaleta (Desarrollo Social).

Para la representante de los trabajadores de la economía social, este tipo de medidas no vendrán a traer soluciones reales a lo que se vive en la calle. “No tenemos que transformar en empleo lo que ya tenemos como empleo. En la economía popular nos hemos creado nuestro propio trabajo, por lo que vemos este plan como algo más que se dice pero en la práctica hará poco”.

El objetivo del Programa es “transformar de manera gradual y con un criterio federal a los programas sociales, educativos y de empleo en trabajo registrado de calidad”, destaca el decreto.

“No entendemos a qué le llaman transformar el trabajo. Sentimos que nos ningunean”, sentenció Crespo. Y agregó: “Hay trabajadores que son contratados por diferentes empresas que no están bien reconocidos, sin estar blanqueados y con otras dificultades. De nuestra parte tenemos un sindicato que nos ampara y peleamos por cada uno de nuestros compañeros”.

Además el programa remarca que apunta a “mejorar la empleabilidad y la generación de nuevas propuestas productivas y promover la inclusión social plena de aquellas personas que se encuentran en situación de vulnerabilidad social y económica”.

En ese sentido Crespo sostuvo: “No falta trabajo, hace falta mejorar las condiciones del trabajo informal. Nos estamos acostumbrando a que el trabajador no tiene reconocimiento. Eso golpea más en los barrios populares donde vive la gente que menos tiene”. Y concluyó: “El trabajo lo tenemos, defendámoslo”.