La reforma jubilatoria propuesta por el gobierno de Santa Fe generó críticas de diversos sectores, incluyendo a los docentes. Martín Lucero de SADOP Rosario, expresó su preocupación por el impacto negativo sobre los trabajadores, especialmente sobre las mujeres. La reforma busca ajustar los beneficios previsionales para reducir el déficit de la Caja de Jubilaciones
Martín Lucero, Secretario General de SADOP Rosario, en diálogo con La Marca de la Almohada, manifestó su rechazo al proyecto de reforma jubilatoria impulsada por el gobierno santafesino, que fue presentado al Senado provincial después de ser elaborado por una comisión legislativa. Lucero destacó que la reforma no solo representaba un ajuste sobre todos los trabajadores, sino que también tenía un impacto desproporcionado sobre las mujeres, especialmente las docentes, obligándolas a trabajar más años con menores haberes jubilatorios.
Lucero criticó que “todos los diputados que hablamos se comprometieron a no firmar proyectos que vayan en contra de los trabajadores”, sugiriendo una contradicción entre las promesas de los legisladores y la reforma finalmente presentada. Según el secretario general de SADOP Rosario, la medida implicaba “un avasallamiento a todos los derechos que venimos trayendo” y señaló que esperaba coherencia de parte de los legisladores para rechazar el proyecto.
El dirigente gremial también expresó sorpresa por la postura del Partido Socialista, señalando que “llama la atención del Partido Socialista que tiene una gran tradición de defensa de los derechos jubilatorios”. Lucero recordó que “el propio Lifschitz propuso que la Caja de Jubilaciones tenga rango constitucional”, sugiriendo que el actual respaldo del partido a la reforma es contradictorio con su historia y principios.
La reforma propuesta plantea un ajuste sobre los aportes y beneficios previsionales, con un enfoque particular en las trabajadoras mujeres. Lucero enfatizó que “es una reforma que ajusta a todos los trabajadores pero sobre todo a las mujeres”, señalando que las docentes se verían obligadas a trabajar más años y realizar mayores aportes, mientras que el régimen de retiro ofrecería un haber jubilatorio reducido. “No existe ningún beneficio con esta ley”, afirmó contundentemente.
Además, el proyecto de ley introduce una preocupación adicional para Lucero, quien advirtió que “el día de mañana, si el gobernador quiere aumentar la edad jubilatoria porque así lo hace el gobierno nacional, tiene la potestad de hacerlo”. Consideró “un disparate” que se otorgue al gobernador la posibilidad de modificar la edad jubilatoria por decreto, una medida que, según él, socava la seguridad jurídica de los trabajadores.
Desde el gobierno provincial, se argumentó que la reforma era necesaria para reducir el déficit mensual de la Caja de Jubilaciones, que asciende a casi 40 mil millones de pesos y que actualmente debe ser cubierto por Rentas Generales de la Provincia. Esta transferencia de recursos, según el gobierno, representa una carga significativa para los contribuyentes privados, lo que hace imperativa una reestructuración del sistema previsional.