Anabella Busso, Licenciada en Ciencia Política y profesora de Política Internacional en la Universidad Nacional de Rosario, brindó su análisis sobre las implicancias de la decisión en entrevista con La Marca de la Almohada
En una decisión que marca un giro en la política exterior argentina, el presidente Javier Milei declinó la invitación para que Argentina se una al bloque de los BRICS, compuesto por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica. Este anuncio, realizado a través de cartas enviadas a los líderes de los países miembros del bloque, generó diversas reacciones y análisis.
A tan solo 18 días de asumir su mandato, Milei comunicó a Luiz Inácio Lula da Silva, Xi Jinping, Vladimir Putin, Narendra Modi y Ciril Ramaphosa su decisión de no participar en el foro multilateral que representa el 40% de la población mundial y el 24% del PBI global. La canciller Diana Mondino informó oficialmente sobre el rechazo, destacando que los cinco países integrantes del BRICS representan el 30% de las exportaciones argentinas.
Anabella Busso, Licenciada en Ciencia Política y profesora de Política Internacional en la Universidad Nacional de Rosario, brindó su análisis sobre las implicancias de la decisión en entrevista con La Marca de la Almohada. Según Busso, el impacto es “100% negativo”, señalando que Argentina retrocede en un compromiso que previamente había solicitado y negociado.
“La conformación de los BRICS muestra la aglutinación de países del sur global, con un grado de desarrollo mayor en algunos casos, pero en su conjunto representan problemáticas comunes a nuestro país”, afirmó Busso. Destacó la importancia de la relación de Argentina con Brasil en la configuración política del bloque.
La profesora también subrayó la relevancia estratégica del ingreso a los BRICS, no solo en términos económicos, sino también en el ámbito geopolítico. “El no estar implica una cuota de aislamiento”, advirtió, aludiendo a la oportunidad perdida de ser una voz escuchada en un bloque que establece temas cruciales en la agenda global.
Busso destacó la contradicción en la negativa, ya que Argentina estaría diciendo “no” a países que son sus principales socios comerciales, desaprovechando la oportunidad de acceder a financiamiento diferente al ofrecido por occidente. En este contexto, el rechazo a la pertenencia al banco de los BRICS se presenta como una negativa a una alternativa de financiamiento con condiciones diferentes.
