El Poder Ejecutivo presentó un presupuesto “equilibrado” al Concejo con la eliminación de 30 tributos municipales para simplificar las percepciones. A la par, propone un recargo del 1,6% a los combustibles que se venden en la ciudad
El Poder Ejecutivo de Rosario presentó ante el Concejo Municipal el proyecto de presupuesto para el año 2024, el documento cuenta con innovaciones y ajustes estratégicos destinados a fortalecer la eficiencia económica y a adaptarse a la realidad del país. Como es la proyección de la eliminación de 30 tasas municipales con el fin de cumplir un plan de simplificación fiscal.
Uno de los puntos más destacados del proyecto es la propuesta de instaurar una sobretasa vial del 1,6% a cada automovilista que recargue combustible en las estaciones de servicio de la ciudad. La medida, según explicó Rogelio Biazzi en entrevista con La Marca de la Almohada, busca financiar de manera exclusiva tareas de bacheo, pavimentación y reparación de calles. Los comercios actuarán como agentes de recaudación, cobrando el tributo por cada litro de combustible.
Simultáneamente, se proyecta la eliminación de aproximadamente 30 tasas municipales, dentro de un plan de simplificación fiscal que pretende agilizar trámites relacionados con la construcción y los planos catastrales.
En ese ssentido, Rogelio Biazzi, destacó la importancia de mantener un presupuesto equilibrado, con ingresos presupuestados de 381 mil millones y gastos estimados en 380 mil millones de pesos. Este pequeño superávit se considera un logro en medio de un contexto inflacionario y cambios gubernamentales a nivel nacional. Además subrayó la eficiencia en el uso de recursos, evidenciando un manejo responsable que ha permitido mantener el nivel de inversión sin aumentar el gasto municipal.
El funcionario también señaló que el presupuesto se ajusta a pautas provinciales, previendo un aumento del 2,7% en el Producto Interno y una inflación cercana al 70%. Además, se anticipó la actualización de la Tasa General de Inmuebles (TGI) utilizando el Índice de Precios al Consumidor (IPC), excluyendo el parámetro de la recolección de residuos. Esta medida, según Biazzi, busca evitar fluctuaciones bruscas en los costos, generadas por ajustes salariales vinculados a las paritarias de los trabajadores de la recolección.