El abogado Gustavo Feldman, abogado patrocinante de uno de los acreedores, detalló el alcance de la orden que impide que la agroexportadora remate bienes para pagar deudas. “La salida que propone es fraudulenta, ilegal e inviable”, aseguró
La Justicia de Rosario le recordó al juez de Reconquista Fabián Lorenzini, quien lleva adelante el concurso preventivo de acreedores de la firma Vicentin, que no es posible homologar la oferta elevada por la propia agroexportadora. Hacerlo, planteó el juez Hernán Postma, significaría “la violación de una orden judicial”.
Como Vicentin proponía afrontar el pago a los acreedores con la venta de activos, la Justicia Penal de Rosario le advirtió a Lorenzini que esa alternativa no es posible de ser aprobada porque todos los bienes le fueron cautelados en el marco de la causa penal que se desarrolla por estafa, asociación ilícita y administración fraudulenta.
En ese marco, el abogado Gustavo Feldman, abogado patrocinante de acreedores de la firma, aseguró en diálogo con Apuntes y Resumen que la decisión de Postma a pedido de su cliente es “una suerte de recordatorio de una medida que tiene plena vigencia” respecto de la interdicción de los bienes y valores de la empresa.
“El acatamiento implica la no aprobación de la propuesta de Vicentin en el concurso. Aspiramos a que esta vez Lorenzini cumpla con la ley y no busque un nuevo atajo para tratar de favorecer a la empresa y a sus ex directivos”, planteó el abogado.
Respecto de cómo marcha el trámite del concurso, Feldman detalló que Lorenzini tiene facultades para resolver en la etapa en la que sólo la empresa puede elevar una propuesta. “Y la salida que propone es fraudulenta, ilegal, inviable. Debe operarse una resolución rechazando explícitamente la propuesta y abriendo la etapa del salvataje, donde cualquiera puede ensayar una propuesta. La misma concursada puede reformular lo que se rechazó, cosa que no va a ocurrir porque la propuesta tenía en miras no pagar, como todo lo que hizo Vicentin desde 2019. El concurso, la pesificación, las propuestas rechazadas. Todo es una articulación para perpetuar los efectos malignos de una verdadera estafa”, evaluó Feldman.
El abogado opinó que Lorenzini “especuló con el clima y los resultados electorales”, pero conjeturó que “gane quien gane” en Santa Fe y la presidencial no imagina “una intromisión que sería grosera y exorbitante buscando la impunidad de los que estafaron a mil cuatrocientos acreedores”.
Respecto a la expectativa que avizora para los próximos meses, Feldman dijo que los acreedores aguardan la apertura del llamado “cram down” o salvataje de la empresa. “La impunidad o no en este tipo de delitos no pasa porque media docena de malandras vayan presas, sino porque las víctimas sean resarcidas”.
En cuanto a la causa que se sustancia en los tribunales de Comodoro Py por la millonaria deuda que la firma tomó con el Banco Nación, Feldman dijo que el trámite se inició “con un ritmo muy intenso”, pero que el fiscal Gerardo Pollicita “después puso segunda y hoy tiene el freno de mano puesto”.
Por último, marcó las diferencias entre los distintos tipos de acreedores y la forma de pulsear que han tenido, por ejemplo, la banca nacional y la internacional. “Hay una zaranda importante entre los créditos que son de entidades públicas, como el Banco Nación, el Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE), el Nuevo Banco de Santa Fe y la Afip. Todos esos créditos que dependen de la órbita estatal son créditos que tiene la sociedad toda. Después está la contracara. A los bancos extranjeros les birlaron cuatrocientos millones de dólares. No hay duda que ha sido una estafa. Pero eso ha tenido un giro copernicano porque antes estaban a la par nuestra, persiguiendo a los supuestos perpetradores de la estafa, y hoy son los principales aliados de la defensa penal de Vicentin. A los bancos les interesa recuperar la plata que le birlaron. Si la empresa quiebra, desaparecen fuentes de trabajo, si le pagan o no a los otros acreedores, a los bancos extranjeros no les interesa”, concluyó.