El economista y politólogo Nicolás Dvoskin analizó la propuesta económica lanzada por la precandidata presidencial de Juntos por el Cambio. Dijo que lo que plantea “es imposible”
El anuncio de la precandidata del PRO, Patricia Bullrich, quien aseguró que en caso de llegar a la presidencia recurrirá a un blindaje financiero sostenido con un nuevo préstamo del Fondo Monetario Internacional, una estrategia que se utilizó con pésimo resultado durante la gestión de Fernando De la Rúa, provocó un revisionismo sobre lo sucedido con la economía en la crisis de 2000 y 2001.
La propuesta de la ex ministra apunta, según declaró a la prensa, a salir del cepo cambiario el primer día de su gestión.
El economista Nicolás Dvoskin, licenciado en Economía y en Ciencia Política, magíster en Historia Económica y doctor en Ciencias Sociales por la Universidad de Buenos Aires, aseguró en diálogo con La Marca de la Almohada que “lo que plantea es imposible”, que “no puede suceder” y que en todo caso el “furcio” que cometió al menos puede ser utilizado para “volver a discutir el 2001, el endeudamiento externo y los riesgos que eso provoca”.
“El blindaje se hace para sostener la convertibilidad. Argentina venía de una recesión larguísima, que ya llevaba dos años y medio. El desempleo venía subiendo fuerte desde el 95. La pobreza estaba subiendo durante toda la década. El endeudamiento externo subió toda la década, porque la convertibilidad se sostuvo en base a las privatizaciones y el endeudamiento. Lo que pasa desde 2000 entra en riesgo la convertibilidad. Hay mucha demanda de dólares de gente que quiere sacarlos del sistema y pone en riesgo el modelo. El blindaje aportó dólares, en principio, para proteger a la economía de las corridas cambiarias. Le da al Estado argentino poder de fuego. Lo que pasó es que esos 40 mil millones rápidamente financiaron fugas de capitales”, recordó el politólogo y economista.
Ante ese panorama, De la Rúa y Domingo Cavallo propusieron el megacanje, lo que Dvoskin define como “un canje de deuda bochornoso”, que derivó años después en el procesamiento de varios funcionarios que participaron de esa decisión.
El endeudamiento encarado por De la Rúa, utilizado para la salida de capitales, se asemeja a lo sucedido durante el Gobierno de Mauricio Macri, que recurrió a un préstamo de 57 mil millones de dólares cedidos por el Fondo.
“Los economistas de Macri dicen que el préstamo del Fondo se tomó para pagar otra deuda, lo que es vedad. Lo que no dicen es que es una deuda que tomaron ellos mismos. No es la deuda que dejo Cristina. Lo que abrió fue un mecanismo de bicicleta financiera. Para que no se llevaran los dólares y renovaran sus LEBAC, había que ofrecer cada vez tasas más altas. Es un esquema Ponzi, más o menos. Sólo se pagaban las deudas con deudas cada vez mayores. Eso empieza a estallar en marzo de 2018. El Fondo vino a salir a cubrir la salida de los dólares de los que estaban vendiendo las LEBAC”, recordó Dvoskin.
En cuanto a la propuesta de Bullrich, lo atribuyó a que cuando la precandidata presidencial “habla de economía, hace agua, le pasa siempre”.
“Larreta también, pero es más cuidadoso. Improvisa menos. Ella improvisa más y termina diciendo cosas incoherentes. El uso de la palabra blindaje es un furcio y termina pateando para el otro lado, al usar un término que usaba De La Rúa cuando hay un intento permanente de desligarse de la gestión de De la Rúa por parte de los funcionarios del macrismo que participaron, entre ellos Rodríguez Larreta. O Gerardo Morales”, aseguró sobre la promesa fallida de la precandidata.
“La propia idea de pedir más plata al Fondo es en este contexto políticamente es improcedente. No se la va a prestar porque está en problemas con Argentina. No está en condiciones de prestarle más plata a Argentina en los niveles que plantea Bullrich. El gobierno de Macri lo hizo con el tema de la salida del cepo al principio y le salió bastante bien. Pero ahora las presiones devaluatorias son mucho mayores, la brecha cambiaria es del cien por ciento, la deuda es mayor, las reservas son menores. Es mucho más difícil esa salida del cepo. Hasta el propio Larreta dice que no puede salir de un día para el otro”, concluyó el economista descartando cualquier posibilidad de avanzar con la propuesta de Bullrich.