El dirigente de Sadop aclaró que el programa alcanzó hasta el momento a un número menor de escuelas y que si se demora su desarrollo un hipotético cambio de gobierno podría desecharlo
El programa de Jornada Extendida PLAN 25, iniciativa acordada por el Consejo Federal de Educación que suma una hora más de clases por día en las escuelas primarias, se implementa en Santa Fe de forma dispar, sin pautas claras y en un segmento acotado, según advirtió el secretario general de Sadop Rosario, Martín Lucero. La intención, según se anunció desde el ministerio de Educación provincial, es que comienza a aplicarse después de las vacaciones de invierno en todos los colegios.
En diálogo con La Marca de la Almohada, el dirigente gremial planteó que “la implementación en colegios privados viene de manera muy desprolija” y estimó que según lo que tienen relevado son unas cuarenta escuelas las que ya lo aplican, por lo que de acuerdo a sus cálculos faltan sumar entre el 85 y el 90 por ciento de los colegios.
“Hubo reuniones el año pasado, pero estaba la ex ministra (Adriana) Cantero. Lo que decimos es que, si hay una planificación del ministerio, tiene que estar segmentado. Tienen que poder explicárselo a los padres. Hubo muchas reuniones de los directivos con las familias, les explicaron que se iba a implementar, pero sin poder dar ningún tipo de precisión”, planteó Lucero.
“Existieron inconvenientes en el cobro, pero se fue ordenando con el tiempo. Tenés el problema que faltan docentes para cubrir las horas. También algún requerimiento de la familia. No es lo más cómodo empezar después de las vacaciones, a mitad del ciclo lectivo, cuando tenés que reorganizar toda la vida familiar. Hubiéramos preferido que se inicie a principios de año. Es lo que el sentido común indica”, aseguró.
El representante de Sadop explicó que la hora que se suma debe estar destinada a reforzar conocimientos en matemática y lectoescritura, y que la idea es parte de “una política inclusiva, que tiende a la equidad educativa”. Pero aclaró, sin embargo, que la forma en que se aplica “es muy desprolija”.
“Pedagógica e ideológicamente es sano y es progresista. Pero si vos lo implementás en agosto, septiembre u octubre, el año que viene cambia el gobierno y se deja de hacer. Pedimos un poco de claridad. Qué colegios van a ser, cuándo se va a implementar. Después de las vacaciones puede ser en agosto, septiembre, octubre, noviembre o la última semana de diciembre, con una prueba piloto. Si no está aceitado para el año que viene corre gran riesgo en caso de que haya cambio de gobierno y lo que no se implementó, no se implemente”, concluyó.