El diputado nacional por Santa Fe y exministro de Transporte, Diego Giuliano, cuestionó con dureza el fallo de la Corte Suprema que confirmó la condena contra Cristina Kirchner. Alertó sobre la politización del Poder Judicial y el impacto institucional de la decisión
En declaraciones a La Marca de la Almohada, el diputado nacional y abogado constitucionalista Diego Giuliano se refirió al fallo de la Corte Suprema que dejó firme la condena a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos contra la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Para Giuliano, se trata de un fallo con fuerte carga política: “Tiene color de proscripción, tiene fundamentos de proscripción, tiene efecto de proscripción. Y la realidad es que en Argentina, la proscripción ha sido una mala praxis a lo largo de la historia”.
El dirigente santafesino destacó que, desde lo técnico, especialistas y juristas de renombre han expresado objeciones al proceso: “Hay expertos en derecho penal, ministros de la Corte de Santa Fe, el propio ministro de Justicia de la Nación, que analizaron la causa —que tiene más de 10 años— y concluyeron que no hay una intervención directa de Cristina Kirchner que justifique la condena”.
Giuliano también cuestionó la imparcialidad del proceso judicial. “El principio de la imparcialidad está tirado a la basura. El juez y el fiscal de la causa tuvieron reiterados encuentros con el expresidente Mauricio Macri. Se necesita una gran impunidad para, luego de esas reuniones, condenar a un adversario político”, advirtió.
El diputado fue más allá y vinculó el fallo con una estrategia política más amplia: “La Corte Suprema de Justicia está desvencijada completamente, y eso explica parte de la situación institucional que vive la Argentina. Este tipo de hechos, como ocurrió tantas veces en nuestra historia, agranda a los dirigentes. Se expanden los liderazgos cuando se intenta eliminarlos por la vía judicial”.
Giuliano enmarcó esta situación en una lógica histórica: “En el siglo XX era exilio o prisión. La eliminación del otro es la ostentación más grande del poder. No se aceptan las reglas de la democracia”.
Finalmente, se refirió al uso político del tiempo judicial: “La causa fue administrada para encubrir las malas épocas de gobiernos anteriores, como el de Macri. Se retoman en momentos estratégicos, y eso termina afectando la calidad institucional del país”.
La sentencia confirmada este martes por los jueces Rosatti, Rosenkrantz y Lorenzetti incluye también el decomiso de 84 mil millones de pesos y dejó en manos del Tribunal Oral Federal 2 la definición sobre la modalidad de detención. La defensa de Cristina Kirchner podría solicitar el arresto domiciliario por su edad, mientras crece la movilización en distintos puntos del país en repudio al fallo.
