La artista porteña, reconocida por su mirada provocadora, despliega su universo icónico en Rosario desde este 11 de abril. Entrada gratuita.
El Museo de Arte Contemporáneo de Rosario (Macro), Oroño y el río, se prepara para recibir una muestra cargada de simbolismo. El próximo viernes 11 de abril, a las 19 horas, se inaugurará “Ceremoniales Iconográficos”, la exposición individual de Karina El Azem, una de las artistas más destacadas de la escena argentina contemporánea.
La muestra, que podrá visitarse hasta el 20 de julio, propone un viaje a través de las obsesiones y las investigaciones visuales de El Azem, con la curaduría de Patricia Rizzo.La obra de El Azem se caracteriza por la repetición de líneas temáticas y una diversidad de procedimientos recurrentes, fórmulas y prácticas que identifican sus esquemas de trabajo y lineamientos conceptuales.
Uno de los ejes de su obra se relaciona con escenarios de represión, delincuencia, sistemas opresivos y violencia urbana en la que balas y municiones aparecen irónicamente embellecidos. En una instalación, exhibe el sistema comunicacional de los ladrones que marcan las viviendas a robar, duplica los códigos dibujados con un encadenamiento de perlas; alguna vez la artista manifestó su intención de producir obras atractivas como forma movilizadora, la reflexión sobre lo estético es parte de su trabajo.
Otra variante entre sus planteos visuales muestra la reproducción de íconos notorios de la identidad argentina. En analogía a Antonio Berni en su señalamiento a la devoción de la Difunta Correa, personificó al santo popular Gauchito Gil y a la recientemente canonizada Mamá Antula. También a Juan D. Perón y a su compañera Eva, replicados en forma serial. En la multiplicidad característica de su obra señala mitos y simbologías que se acentúan y resignifican.
En otras series explora la tensión entre lo real y artificial e indaga en las nociones de lo artístico y decorativo como interpelación de los conceptos. La serie Naturaleza artificial muestra piezas realizadas con canutillos de vidrio, mostacillas y cuentas pegadas de a una o enlazadas, en una labor obsesiva que cita la tradición femenina vinculada al trabajo artesanal.
La muestra antológica recorre parte de su trayectoria y su producción más reciente. Incluye paisajes urbanos y naturales con pinturas que cambian de color según el clima, instalaciones que resignifican objetos cotidianos y series que exploran la tensión entre lo real y lo artificial.”Ceremoniales Iconográficos” es una muestra que no pasará desapercibida, su estilo y concepto subyacente marcará, sin dudas, un antes y un después en la experiencia visual de quienes visiten esta muestra.