El juez federal Ariel Lijo ordenó que la Secretaría de Derechos Humanos asegure el funcionamiento pleno de los sitios de Memoria en ex centros de detención, tras denuncias por despidos masivos y desmantelamiento institucional. La medida busca preservar espacios clave en la lucha por los derechos humanos y la construcción activa de memoria

La Justicia Federal dictaminó que los espacios de Memoria que operan en los ex centros clandestinos Olimpo, Club Atlético, Automotores Orletti y Virrey Cevallos deben permanecer en funcionamiento con personal capacitado. La resolución, emitida por el juez Ariel Lijo, responde a una presentación de la legisladora porteña Victoria Montenegro, quien alertó sobre los despidos masivos en la Secretaría de Derechos Humanos que amenazan la sostenibilidad de estos lugares emblemáticos en la reconstrucción histórica del país.
Montenegro, nieta recuperada y presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Legislatura porteña, celebró el fallo. En diálogo con La Marca de la Almohada, destacó: “Se logró un pronunciamiento de la justicia en un contexto donde el gobierno nacional no cesa en sus ataques contra los organismos de derechos humanos, despide trabajadores y desmantela la Secretaría. Frente a tanta obscenidad, hay que celebrar este posicionamiento judicial”.
El fallo surge en medio de un panorama crítico para los espacios de Memoria. Desde diciembre de 2024, el gobierno nacional implementó recortes presupuestarios y despidos en organismos clave como el Ministerio de Defensa, la Conadi y la Secretaría de Derechos Humanos. Montenegro denunció que estas medidas forman parte de un plan sistemático que pone en riesgo la preservación de sitios esenciales para la investigación judicial y la transmisión de la memoria histórica.
La legisladora detalló que presentaron dos acciones judiciales. Una denuncia penal contra el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, y el secretario de Derechos Humanos, Alberto Baños, por incumplimiento de deberes de funcionario público, y una medida cautelar para proteger los sitios de Memoria en Buenos Aires. “Estos lugares aún son pruebas para la Justicia, lo que refuerza la necesidad de preservarlos”, subrayó.
Montenegro ilustró el impacto del abandono oficial con el caso del Virrey Cevallos, donde “quedó con cero trabajadores, un lugar por donde pasan chicos, escuelas, y que ahora no tiene mantenimiento ni equipos pedagógicos”. La falta de personal y recursos compromete no solo la conservación física, sino también las actividades educativas destinadas a las nuevas generaciones.

El gobierno nacional argumentó públicamente la necesidad de ajustar el gasto público, pero para Montenegro, estas acciones son “un ataque directo” contra los derechos humanos. En ese sentido, enfatizó: “Tenemos leyes y, mientras estén vigentes, el gobierno tiene la obligación de cumplirlas, más allá de las agresiones en redes sociales contra organismos como Abuelas de Plaza de Mayo, reconocidas mundialmente”.
La importancia de estos sitios excede el ámbito simbólico. Espacios como el Club Atlético y Automotores Orletti contienen rastros físicos de crímenes de lesa humanidad y son esenciales para las causas judiciales en curso. Según Montenegro, “tener sitios sin presupuesto es condenarlos al deterioro y a la pérdida de elementos claves para recomponer historias e identidades”.
El juez Lijo resolvió que los espacios de Memoria deben ser mantenidos operativos con el personal necesario, destacando su función pedagógica y judicial. “Es un avance en la defensa de estos lugares que cuentan lo que sucedió y que son esenciales para un país que decidió hacer de la memoria una política de Estado”, concluyó Montenegro.
La legisladora también criticó el contexto político, subrayando las intenciones del gobierno de Javier Milei y su vicepresidenta, Victoria Villarruel, de deslegitimar la memoria colectiva y reivindicar el accionar de la dictadura. “El trabajo que hacemos en estos lugares no solo preserva pruebas para la Justicia, sino que construye un futuro mejor. Este gobierno está decidido a erradicar eso”, lamentó.