El Concejo Municipal de Rosario aprobó por unanimidad la creación de la Mesa de Gestión de Veredas y Vías Peatonales, una iniciativa que busca coordinar los esfuerzos para la reparación y mantenimiento de las mismas en toda la ciudad. La propuesta, impulsada por la concejala socialista Alicia Pino, tiene como objetivo mejorar la calidad de las aceras y asegurar su accesibilidad y transitabilidad

Este jueves, el Concejo Municipal de Rosario dio luz verde a una ordenanza que establece la creación de la Mesa de Gestión de Veredas y Vías Peatonales. Se trata de un espacio que centralizará las tareas relacionadas con la reparación, mantenimiento y construcción de las mismas en la ciudad. El proyecto, presentado por Alicia Pino del bloque Socialista, busca poner orden en un tema que afecta el día a día de los vecinos: el mal estado de las veredas.

En diálogo con La Marca de la Almohada, Pino explicó que la situación actual es complicada, ya que hay muchas veredas dañadas o mal reparadas en distintos puntos de la ciudad. “La rotura de veredas fue siempre una de las principales quejas de los rosarinos. Hoy, la situación es crítica: tenemos un montón de veredas rotas o mal reparadas, y esto sigue siendo un problema constante”, afirmó la concejala.

La idea detrás de esta iniciativa es que una sola oficina coordine todos los trabajos relacionados con las veredas. Hasta ahora, según Pino, más de una docena de oficinas municipales y empresas de servicios intervenían en las reparaciones, lo que generaba desorganización y mala calidad en los arreglos. “Hoy, entre el municipio y las empresas de servicios, hay cerca de 14 oficinas involucradas. Esto genera muchos problemas de coordinación, y eso se refleja en veredas mal reparadas o que se vuelven a romper”, explicó.

El nuevo organismo también tendrá la tarea de generar estrategias para ejecutar planes integrales en cada distrito de la ciudad, para que las reparaciones y construcciones se hagan de manera simultánea y más efectiva. Además, se prevé la creación de convenios con distintos niveles del Estado y con empresas privadas para llevar adelante los trabajos.

Pino subrayó que, si bien los frentistas tienen la responsabilidad de mantener las veredas frente a sus casas, muchas veces estas son dañadas por empresas de servicios que intervienen para realizar obras, como las de electricidad, agua o gas. “Aunque los frentistas son responsables, muchas veces después de que hacen las veredas, estas son intervenidas por ampliaciones de redes de luz, gas, fibra óptica o agua. Y ahí es cuando el municipio tiene que intervenir para garantizar que las reparaciones queden bien”, destacó.

Uno de los objetivos principales de la Mesa de Gestión será justamente asegurar que las reparaciones se hagan con la calidad necesaria para que las veredas no se sigan rompiendo o deteriorando rápidamente. Este organismo tendrá la capacidad de coordinar todas las intervenciones y trabajar de manera conjunta con empresas y vecinos para garantizar que las aceras de Rosario mejoren en calidad y durabilidad.

Además, el proyecto contempla la participación activa de las vecinales. Estas organizaciones podrán funcionar como puntos de información sobre las obras que se realicen en cada barrio y también podrán actuar como veedores, es decir, podrán supervisar que los trabajos se realicen de manera adecuada y en los plazos establecidos.

Otra de las propuestas que se incluye en la ordenanza es la creación de un fondo específico que será utilizado exclusivamente para financiar las reparaciones y construcciones de veredas. Este fondo busca asegurar que los recursos se destinen de manera eficiente a mejorar el estado de las aceras y a garantizar que las obras se hagan con la calidad necesaria.

“Con esta iniciativa queremos darle prioridad a un tema que afecta mucho la vida cotidiana de los rosarinos: la calidad de las veredas. Las aceras no solo son necesarias para caminar, también juegan un papel clave en cómo nos movemos por la ciudad, cómo garantizamos la accesibilidad para todos y cómo hacemos que Rosario sea más segura y habitable”, comentó Pino.

Uno de los aspectos más importantes del proyecto es que se busca garantizar que las veredas sean accesibles para todos, especialmente para personas con discapacidad. En este sentido, la Mesa de Gestión trabajará en conjunto con organizaciones que promueven la accesibilidad urbana, además de la Comisión Asesora de Planificación Urbana. “Es fundamental que todas las obras incluyan criterios de accesibilidad. No podemos permitir que las personas con discapacidad sigan encontrando barreras para moverse por la ciudad”, agregó.

Esta propuesta llega en un momento en el que los reclamos de los vecinos por el mal estado de las veredas han ido en aumento. Según Pino, los problemas se volvieron más visibles en los últimos años debido al crecimiento de la ciudad y a la falta de una planificación adecuada para las intervenciones que realizan las distintas empresas de servicios.

El trabajo de la Mesa de Gestión no se limitará a reparar las veredas que están en mal estado, sino que también se enfocará en prevenir futuros deterioros. El organismo estará encargado de asegurarse de que las obras se hagan correctamente desde el principio, para evitar que las reparaciones sean solo un “parche” temporal.

Alicia Pino concluyó su destacando que la creación de la Mesa de Gestión de Veredas y Vías Peatonales es un paso clave para mejorar la transitabilidad en Rosario. “Es un problema que nos afecta a todos y que requiere que trabajemos juntos para solucionarlo. Esto es solo el primer paso, pero es fundamental para asegurar que las veredas de nuestra ciudad sean más seguras y accesibles para todos”, cerró.