El arzobispo de Rosario dialogó con Radio UNR y brindó su mirada sobre la realidad social, la falta de empleo y la problemática del incremento del consumo de drogas y alcohol en los barrios. Exhortó a la dirigencia política y llamó a la solidaridad ciudadana.
“La figura de San Cayetano ha calado hondo en nuestro pueblo”, dijo el Monseñor Eduardo Martín, arzobispo de Rosario en el día que la feligresía católica celebra a su santo y esto es porque “siempre estamos en crisis y el tema del trabajo produce una crisis social” analiza el sacerdote en Apuntas y Resumen.
Martin manifestó que “nunca llegamos al pleno empleo que se necesita para que cada argentino se gane su pan con el sudor de su frente y con un trabajo digno”.
En cuanto a su análisis sobre la actualidad social y económica el Monseñor Martin expresó que “tenemos una recesión que afecta al empleo y perjudica también a las personas que tenían trabajo informal porque afecta a las chanchas que ellos podían realizar”.
En este sentido el sacerdote exhortó a “quienes tienen la responsabilidad de conducir el bien común puedan generar políticas que brinden las condiciones para que otros inviertan y se den fuentes de trabajo para que cada uno tenga su oportunidad”.
Para el arzobispo de Rosario “Argentina debería estar mucho mejor con menos gente en la pobreza y en la indigencia” y esta situación la justifica porque “en los últimos años fue empeorando, pero ahora estamos en un cambio de métodos pero no vemos que este sacrificio sea una recuperación o si vamos a terminar más abajo”.
En este sentido argumentó que “los métodos no han funcionado, ni uno ni otro” y cree que el nuevo gobierno de Milei “generó una esperanza pero yo digo que Dios quiera que se pueda dar una recuperación. No soy experto en economía pero uno observa que hasta ahora en 40 años de democracia fuimos para atrás en cosas tan elementales”.
“Hay cosas que tenemos que preguntarnos, porque hay cosas que no hemos hecho bien”, insistió el sacerdote que dirige la Catedral de Rosario.
En cuanto a la situación social manifestó que “la pobreza aumentó así como el trabajo de Caritas y también el consumo de estupefacientes. Hay gente en los barrios que no pueden trabajar más de tres horas por día por el consumo de drogas y alcohol”.
Finalmente llamó a la solidaridad de la ciudadanía “con este humano que tenemos al lado”.