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“El grito Ni Una Menos es hacer visible ese reclamo que el gobierno niega”

Cada 3 de junio, desde 2015, las calles del país y la ciudad se llenan de mujeres marchando bajo la consigna “Ni una menos” para exigir el cese de la violencia de género. Gabriela Sosa, integrante de la mesa federal de Mumalá, enfatizó: “En los últimos 9 años hemos tenido por año un promedio de 250 asesinadas por violencia machista, un total hasta el 30 de mayo de 2348 víctimas a nivel nacional y a fecha de hoy este año lleva 89”.

En el marco del 3J, miles de rosarinas se preparan para marchar nuevamente bajo la consigna “Ni una menos” exigiendo el cese de la violencia de género. El Ejecutivo municipal dispuso que el transporte urbano de pasajeros (TUP) será gratuito de 12 a 22 para facilitar la participación en la movilización y los actos. La concentración comenzará a las 15 en la Plaza San Martín, desde donde partirán a las 16 hacia el Monumento a la Bandera.

Desde 2015, las organizaciones feministas en Argentina denuncian que una mujer muere cada 33 horas por violencia de género. Este año, el Observatorio de Mumalá reporta al menos 89 víctimas de femicidios. Gabriela Sosa, integrante de la mesa federal de Mumalá, en diálogo con La Marca de la Almohada destacó la gravedad del contexto actual: “En los últimos 9 años hemos tenido por año un promedio de 250 asesinadas por violencia machista, un total hasta el 30 de mayo de 2348 víctimas a nivel nacional y a fecha de hoy este año lleva 89”.

La marcha de este año también reclama justicia por la masacre de Barracas y denuncia los recortes en políticas de género. Un informe reciente de ACIJ y ELA revela que el presupuesto en políticas de género en 2024 es un 26.8% más bajo que el año pasado, afectando la asistencia y prevención de la violencia. Sosa subrayó: “El contexto implica a 9 años de este grito por violencia de género, se van a multiplicar las violencias y estos desenlaces fatales porque contamos con menos herramientas desde el Estado para su abordaje, para su atención, para la asistencia, para la prevención. Con menos equipos y trabajadores que escuchen y asesoren en el orden nacional y provincial”.

Además, Sosa señaló la relación entre la precarización económica y la violencia de género: “La precarización de la pobreza llevada a situaciones de desempleo y cualquier tipo de autonomía económica no hace otra cosa más que fortalecer la dependencia de muchas mujeres que conviven en hogares violentos y que la posibilidad de poder independizarse económicamente es también independizarse de un agresor”.

Las organizadoras llaman a movilizarse contra todas las formas de violencia: “Contra todos los abusos, maltratos y violencias sobre las niñeces, mujeres, lesbianas, travestis, trans”. Sosa criticó al gobierno por su falta de apoyo y mensajes de odio: “Un gobierno que alienta las violencias que nos ha elegido junto a los pobres, los trabajadores como centro de su ataque en lo material cuando elimina un ministerio o expulsa trabajadores o cierra puestos de trabajo”.

La marcha de hoy busca visibilizar estos reclamos y hacer frente a la negación del problema por parte del gobierno: “El grito Ni Una Menos de hoy es hacer visible ese reclamo que el gobierno niega”, concluye Sosa.