Lo afirmó la presidenta del Concejo Municipal en relación al recorte en los subsidios al transporte público y en el marco de la solicitud del intendente al Concejo para declarar en “Estado de Emergencia” al Sistema de Transporte Urbano de Pasajeros (TUP). Este jueves se debate en el recinto.
El intendente Pablo Javkin envió un pedido formal al Concejo para declarar en “Estado de Emergencia” al Sistema de Transporte Urbano de Pasajeros (TUP) y poder así aumentar la tarifa en base al Estudio de Costos (el último arrojó un valor de $1.343 por viaje). Es decir que, en caso de aprobarse según el porcentaje estipulado, el pasaje podría pasar a valer hasta $1200.
La nota presentada este miércoles por el intendente solicita facultar al Poder Ejecutivo para “disponer adecuación tarifaria adicional a la prevista en la Ordenanza 10.587 de modo tal que la tarifa resultante alcance a la cobertura de hasta el 90 por ciento de los valores que arrojen los estudios de costos elaborados por el Ente de la Movilidad de Rosario”.
“Lo dispuesto regirá por el plazo de un año contado desde la fecha de promulgación de la norma, pudiendo ser prorrogado a criterio del Departamento Ejecutivo por el mismo plazo”, cierra el proyecto de Ordenanza firmado por Javkin. El pedido será tratado por el Concejo en la sesión de este jueves.
Apuntes y Resumen habló con María Eugenia Schmuck, presidenta del Concejo Municipal, quien afirmó que es una decisión política del gobierno Nacional contradictoria y aseguró que son los ciudadanos rosarinos los principales actores que se verán perjudicados.
“Esta es una decisión política del gobierno nacional que nosotros no comprendemos, ni siquiera desde la perspectiva ideológica del propio presidente que quiere ahorrar dinero en transferencia a las provincias. Si obliga a cada ciudad a aumentar la tarifa de transporte, él va a tener que pagar el 55% de todo los atributos sociales de la Sube, es decir va a tener que pagar mucho más dinero con un boleto mucho más caro, el gobierno Nacional lejos de ahorrar va a tener que invertir en la sube mucho más, o sea que desde el punto de vista económico de ahorro no se entiende para nada”, señaló Schmuck.
Y añadió: “Creo que esto en lugar de ser una represalia política hacia algunos gobernadores, hacia algunos dirigentes políticos, es una represalia hacia los trabajadores, hacia los estudiantes, hacia todos los que usan el transporte público, porque la única manera de sostener un sistema de transporte cuyos costos aumentaron el 300% en los últimos 2 o 3 meses, y que además se le quita el 30% de los subsidios que daba Nación, es aumentando la tarifa. Es decir que recae nuevamente en aquellos que sostienen la economía, que sostienen el sistema de transporte y que, en definitiva, fueron los que muchos de ellos eligieron como presidente. No se entiende sinceramente que esta represalia en lugar de ser contra la casta, como el le gusta decir, sea contra los vecinos y vecinas de la ciudad de Rosario, que son los que van a pagar las consecuencias de esta decisión política que es un comunicado de prensa, ni siquiera es una resolución”.
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