Sergio Rodríguez, referente de la Cámara de Frigoríficos provincial, dijo que la fuerte suba se debe a las últimas medidas económicas anunciadas por el nuevo gobierno de Javier Milei
En el marco del contexto económico argentino y de las últimas medidas anunciadas por el gobierno de Javier Milei, desde la Cámara de Frigoríficos de Santa Fe (Cafrisa) advirtieron que a partir de este jueves el kilo de carne se venderá a no menos de 8 mil pesos en la provincia, pudiendo llegar en algunos cortes hasta cerca de los 10 mil. Así lo aseguró Sergio Rodríguez, referente de la cámara, en contacto con Apuntes y Resumen.
“Después de los anuncios de (Luis) Caputo, en lo que respecta al mercado de carnes, hoy nos encontramos con una libre comercialización, lo que hace que el precio de la hacienda tome su valor por el juego de la oferta y la demanda. Estamos viendo que día a día sigue aumentando, por ejemplo el otro día hablábamos de un valor de 7 mil pesos por kilo a mostrador, y hoy ya vemos que va a estar entre los 8 y 10 mil pesos”, admitió.
Según detalló, este miércoles el precio del kilo en pie ya superó los dos mil pesos. “Nos preocupa más que nada a futuro, pensando en el mes de de enero y febrero que son de bajas ventas. Ahora medianamente la carne se está vendiendo porque vienen las fiestas y la gente está con plata en el bolsillo, tiene el aguinaldo, cobra el sueldo, algo que paga con tarjeta. Pero en el verano empiezan los los ajustes de cada uno y ya no se permite comer un asado, reemplaza la carne por pollo. Y esa baja del consumo de carne va a afectar a las industrias”, subrayó.
Para Rodríguez, las condiciones de la gran sequía, que provocó que no haya una gran cantidad de hacienda cerrada y engordada, provocó que los frigoríficos salgan a buscar al mercado, no consigan animales, y como tienen que cumplir salen a pagar un poco más, aumentando el precio. “El engorde de un novillo pesado lleva años, y con las medidas políticas que hemos tenido, con muchos productores que dejaron la ganadería y se pasaron a la agricultura, hemos perdido un stock ganadero. Este año se habla de más de un millón de cabezas perdidas, y todo eso lleva a una suba del precio de la hacienda”, remarcó.
Sin embargo actualmente, “con las nuevas lluvias y el buen clima, empieza a haber algo más de pasto y el productor larga a engordar a pastura. Eso tiene una demora de entre seis meses y un año, con respecto a lo que es un feed lot que en tres meses lo está engordando. Entonces, estamos padeciendo ese cuello de botella que ya lo veíamos venir. Todos los años, siempre a fin de año, el precio de la hacienda mueve un poco, pero no al nivel de este año. Pensábamos que iba a haber una suba, pero no de este de este nivel, y lo que nos preocupa es cuál va a ser el techo”, cerró.