La necesidad de pensar coaliciones de gobierno ademàs de electorales, la autocrítica necesaria y una mirada de largo plazo para conjurar los pardigmas ultraconservadores en avance desde hace años en el programa especial de Apuntes y Resumen con referentes sindicales
En el estudio de Radio Universidad compartieron el anàlisis de la impronta liberal que tiñe la campaña electoral nacional Sonia Alesso, referente de Amsafé y secretaria general de Ctera, Silvana Teissa, concejala y dirigente de la UOM, y Walter Palombi, secretario general del Sindicato de Correos y Telecomunicaciones.
Para Alesso, los resultados de las primarias remiten a una crítica al gobierno de Alberto Fernández, de lo que deriva una expectativa de que se cambie el rumbo como algunas de las medidas recientes anunciadas por el candidato presidencial y ministro de Economía, Sergio Massa. Por ejemplo, la excensión del impuesto a las Ganancias para los trabajadores o la devolución del IVA. De lo que se rata, señaló la dreferente de loso gremios educativos, es de un conflicto por la redistribución de la riqueza.
Tessa recalcó que no debe interpretarse el alto caudal de votos cosechado por el candidato libertario Javier Milei como una derechización del electorado, y ejemplificó con el caso de Rosario, la buena elección del espacio Rosario sin Miedo con Juan Monteverde como candidato a intendente. Cuando hay otra alternativa, hay acompañamiento. Porque, siguió, se mantiene la esperanza y la espera de una construcción política que apunte a los derechos.
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Teissa compartió el saludo a la gran elección del espacio que compitió con el oficialismo de Pablo Javkin y Unidos, después de una interna diferente, sin golpes bajos, y destacó la necesidad de generar una alternativa abarcativa de toda la ciudad. No es sólo electoral, aclaró: “Vamos a seguir trabajando”. Respecto del futuro de la coalición entre sectores del peronismo y Ciudad Futura, recordó la serie de espacios de debate que comienzan el sábado 16. Sobre las elecciones para los cargos provinciales, opinò que no se pudo convencer al electorado de que había un frente preparado para modificar una realidad adversa, sobre todo en el tema inseguridad.
Palombi se unió a la celebració de una construcción política “inteligente” en la ciudad, y lamentó que no se haya podido concretar hace cuatro años, quizá con más posibilidades de acceder al Palacio de los Leones, porque la coalición que hoy está en Unidos jugaba separada.
En el plano provincial, el dirigente de Correos y Telecomunicaciones enfatizó que al candidato Marcelo Lewandowski “no se le puede reclamar nada” en referencia al triunfo histórico del frente Unidos: “Sacó los votos históricos del peronismo”, recordó. Como contrapartida, señaló como gran responsable del resultado adverso y contundente al gobernador Omar Perotti por alejarse en la gestión de las políticas nacionales y, en las elecciones de este año, escamotear el apoyo a los postulantes de todas las categorías excepto la de Diputados que encabezó, que ni siquiera logró quedarse con la mayoría automática como para tener una base de reconstrucción de poder desde la Legislatura.
Los trabajadores y los jóvenes
Alesso repasó no el discurso sino el programa “escrito” de gobierno de Milei para reclamar atención a su avance y medir los riesgos que lo acompañanan. Enumeró la impronta de persecución gremial, la explicitación de una revisión de la ley de contrato de trabajo y del derecho de huelga, además de un avance sobre la ley de obras sociales y la de asociaciones sindicales, o la proclamada eliminación de las indemnizaciones. También, en la plataforma electoral del libertario, la definición del empleo estatal como servicio esencial, con lo cual se le sustrae el derecho de huelga de acuerdo a la normativa de la OIT (Organización Internacional del Trabajo). Más, siguió, la intención de eliminar los aportes patronales.
Parecida es la propuesta de la candidata de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, aclaró Alesso. Y preguntó cómo justifican los sectores que se llaman progresistas el acompañamiento en una alianza que promueve esas propuestas regresivas en derechos.
Frente a los resultados de las primarias nacionales y el desglose de los votantes de Milei, Palombi terció que “no hay que echarle la culpa a los jóvenes” sino a los dirigentes del llamado campo nacional y popular por no haberlos sabido interpelar. Y respecto del movimiento obrero organizado al que pertenece, admitió que deberá revisarse el no haber atendido la creciente masa de trabajadores informales que manejan otras lógicas. El discurso electoral, pero no solo él, no los incluye. Pidió reconsiderarlo, lo mismo que las acciones políticas y las propuestas. Puso el ejemplo de los trabajadores de cadeterías por plataformas, que resisten la sindicalización a pesar de la expectativa de ganancia de derechos que implica.
“La gente votó en 2019 al Frente de Todos para continuar las políticas del 2003 al 2015 y no se cumplieron esas expectativas“, marcó los déficit de una gestión que, como contrapartida, mostró políticas inclusivas y de protección social durante la pandemia, presencia estatal con los ATP para sostener los puestos laborales en la crisis sanitaria y una recuperación del empleo significativa pero contradictoria: a muchos de los que ingresaron o volvieron al mercado laboral, el salario no les alcanza para una vida digna.
Palombi admitió los tiempos difíciles pero consideró que no pueden justificar los déficit. “Es cierto que hubo una pandemia, una guerra y la sequía, pero antes estuvo el tema (del consorcio agroexportador) Vicentin, con la disputa por los alimentos, y el del río Paraná” y el negocio de la Hidrovía en el que está en juego la soberanía sobre el principal corredor fluvial del país. El dirigente celebró las recientes medidas del gobierno nacional, en cabeza de Massa, pero de nuevo cuestionó que no se hayan tomado antes.
Es la política, más allá de las elecciones
Alesso alertó que más que transformar los armados electorales hay que transformar la política, porque “los partidos, tal como están hoy, no le sirven a la gente”. Que se puede, insistió, lo demuestran las elecciones locales en ROsario: una una nueva estrategia, de construcción más tranversal, de confluencia de distintas trayectorias, más plurales.
Y contextualizó sobre el avance de propuestas como las que materializan Milei o Bullrich: la derechización, dijo, no es un fenómeno argentino, pasa en Suecia, Italia, Francia, en Colombia, pasó en Brasil con Jair Bolsonaro. La mirada debe exceder, completó, lo coyuntural, porque afirmò que son fenòmenos de construcción meditada y larga data. Las campañas basadas en las redes y los millonarios fondos que financian a los emergentes de esos espacios desde hace años son la muestra de una planificación. “Milei hace seis años que sale por televisión”, puso como perla de ese proyecto que es, volvió, transnacional y serio. Hay que entender, completó, que se trata de un cambio de paradigma que se consolida, y que arrastra derechos recientemente conquistados como el de las mujeres o las diversidades calando en las percepciones de diversos sectores sociales.
Alesso llamò a centrar la atención en el copamiento de la agenda pública y además de los modos de hacer política, “centrada en el Tik Tok y los clics”, para recuperar tradiciones centradas en la defensa de lo público y de los espacios comunitarios. Esto, inclusive, en el ámbito laboral, a lo que se sumó Palombi: de la pandemia para adelante, el trabajo remoto asoma como amenaza a la organización y el intercambio y refuerza el paradigma individualista y meritocrático que esgrimen Milei y Bullrich desde lo institucional partidario.