Como parte de la renovación del servicio eléctrico de transporte, se incorporó otra unidad adaptada más económica, ecológica, y con impacto social positivo
Este martes lo sacaron a hacer pruebas, y funcionó todo en regla. Así que hoy arranca ya en calle la tercera unidad reconvertida de la línea K, como parte de la renovación del servicio eléctrico de transporte. Se trata de la unidad Nº 35, que tras un trabajo de reconversión de un motor diésel a eléctrico, realizado conjuntamente por la Municipalidad de Rosario, la empresa Movi, Inventu y la Universidad Nacional de Rosario (UNR); se pone en funcionamiento en el sistema de transporte urbano de la ciudad. La nueva unidad se pone en marcha y pasa a formar parte de la flota del servicio de troles, uno de los modos de movilidad más emblemáticos del transporte urbano en la ciudad, tal como los coches que ya circulan, las Nº 33 y 34. En tanto, en las próximas semanas se estrenará en el asfalto el cuarto coche que forma parte de este programa, que ya se encuentra en la etapa final de su fabricación, y se inició el proceso de compra de insumos para otras dos.
El proyecto es fruto de un trabajo colaborativo entre el ámbito público y privado, que inició hace meses un proceso de renovación de la línea K del transporte urbano de pasajeros, con la incorporación progresiva de unidades diésel reconvertidas en coches eléctricos. La actualización implica la reconversión de colectivos urbanos a diésel, que hayan superado los 10 años de antigüedad, y transformarlos en trolebuses, utilizando su chasis con el montaje de motor eléctrico y sistema de control. Esto permite la renovación gradual de la flota, optimizando el sistema de transporte urbano y los servicios disponibles para los vecinos de la ciudad; respondiendo de forma dinámica a la demanda de la ciudadanía.
“Se trata de un desarrollo 100% rosarino, hecho por profesionales y técnicos de nuestra ciudad, lo que nos genera un gran orgullo. No hay muchas experiencias como estas y la generamos desde acá. Apostar al transporte eléctrico es vital para nuestro sistema, y esta variante no solo nos permite reducir costos, sino también avanzar más rápido en este tipo de unidades”, dijo Alejandro Gentile, presidente de Movi Rosario, quien destacó a su vez que “ante la crisis económica, que siempre afecta a los sistemas de transporte, avanzamos en una iniciativa que requiere una inversión del orden del 30% en relación a un trolebús nuevo”.
El titular de la empresa de transporte municipal agregó que “estas unidades presentan una renovación total de su carrocería, con una motorización eléctrica que permite reemplazar la flota antigua de troles de la línea K, que viene operando ininterrumpidamente desde el año 1994, con el valor agregado de ser unidades adaptadas para personas con discapacidad y contar con aire acondicionado, permitiendo así sostener este modo de transporte sustentable y tan característico de nuestra ciudad”.
Ventajas
Al igual que los coches Nº 33 y 34 , que ya brindan un óptimo servicio como referencia de acción, entre las nuevas características del coche Nº 35, se destaca la incorporación de piso bajo garantizando la accesibilidad, aire acondicionado, fácil mantenimiento y la renovación total, tanto en el interior como en el exterior. Los trabajos de reconversión de las unidades representan un tercio del valor de un coche nuevo, realizados con una articulación público-privada, con empresas locales y la participación de la UNR. Entre los beneficios se destacan que son económicos, ya que requiere de una baja inversión y un bajo costo de mantenimiento en relación a la flota actual.
Cabe destacar que utilizan componentes de fácil acceso en el mercado (a diferencia de lo que sucede con los coches actuales); y cuentan con mayor vida útil que los vehículos convencionales, prolongando su utilización. Son ecológicos, no liberan emisiones, por lo que no produce impactos en el ambiente. Al tratarse de motores eléctricos, generan menos ruido que los de combustión. Tienen un beneficio social, porque generan trabajo local y resulta estratégico fomentar una industria innovadora que comienza a ser una tendencia en el mundo. Y un punto positivo adicional de esta renovación es la capacidad de desarrollar este tipo de vehículos con mano de obra local y calificada.
Además, vale mencionar la importancia del recorrido de la línea K que permite conectar la zona noroeste con el área central y la Ciudad Universitaria Rosario (CUR), lo que la convierte en una línea de mucha utilidad para una gran parte de la población estudiantil, docente y no docente.
La incorporación se da en el marco de una iniciativa del municipio rosarino para reforzar el Transporte Urbano de Pasajeros, con el anuncio de la compra de 50 nuevas unidades que se sumarán a los 57 coches cero kilómetro integrados este año tras la adecuación del sistema en la pandemia. El proceso permitirá una gradual renovación de la flota dando un avance en calidad y optimizando los servicios disponibles a los vecinos de la ciudad. Hoy en día, la cantidad de coches en calle es de 690 unidades, y la idea es que la mitad de los incorporados permitan que se renueve la flota, mientras el 50% restante de las que llegan permitan ampliar ese número. Las características responden al pliego vigente, lo que permite un mayor confort a los usuarios, con aire acondicionado y distintos implementos que hacen una movilidad más accesible y sustentable.