El candidato a diputado nacional por Hacemos Por Nuestro País analizó las elecciones primarias de este domingo en Santa Fe. El socialismo superó el piso mínimo obligatorio para acceder a los comicios generales del 22 de octubre
Paulón aspira a reemplazar la banca del también socialista Enrique Estévez en el Congreso de la Nación desde el próximo 10 de diciembre dentro del espacio Hacemos Por Nuestro País, que tiene como referencia nacional al candidato presidencial Juan Schiaretti. En la lista lo acompaña la nadadora santafesina Vanesa García como segunda candidata legislativa y Gustavo Leone como postulante a una banca en el Mercosur por el distrito.
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El socialista, activista de los derechos LGBT+ y ex subsecretario de Políticas de Diversidad Sexual de Santa Fe, calificó las PASO nacionales de este domingo como “complejas” en la provincia, por el poco tiempo que medió desde las internas santafesinas, sin posibilidad de armar una campaña más contundente. De todos modos, en diálogo con el programa La Marca de la Almohada, expresó satisfacción por el resultado que obtuvo su alianza política, que cosechó alrededor de 61 mil votos y superó el piso para la participación en las generales de octubre.
De ahora en más, señaló, se abre una elección distinta con el desafío de centrarse en propuestas y ampliar las adhesiones. Interpretó que hay posibilidades de hacerlo dado que de las 34 boletas en juego para las PASO quedaron en carrera sólo cinco. Y que hay posibilidades de sumar adhesiones desde el frente que integra, dado que en las PASO no fue una propuesta tentadora para la participación por llevar lista única y no expresarse como una verdadera interna que siempre –dijo– es más convocante.
El caso Milei
Respecto de la “sorpresa” de las elecciones, que fue el 30% de los votos obtenidos por el candidato presidencial de La Libertad Avanza, Javier Milei, Paulón evaluó que “más que una derechización, se trata de enojo y bronca” canalizadas en la figura del libertario. Agregó que no es sólo una crisis económica la que empujó el desempeño del economista, sino de expectativas sobre problemas como la inseguridad y la inflación.
En esa línea, el socialista consideró que no se leyó el dato de un amplio sector social “que la pasa mal” y consideró que el desafío es hacer una lectura fina de lo ocurrido. De todos modos, recalcó que la decisión por no votar a ninguno de los postulantes es elevada: alrededor de un 40% entre el 31% de abstención y el 10% de voto en blanco.
Sobre el espacio al que pertenece, Paulón admitió que el reto será impedir que la polarización, ahora en tres tercios, no licúe los votos obtenidos. Y en el caso de que se de el escenario de una segunda vuelta, decidir a quién acompañar atendiendo a los frentes o partidos que disputen en segunda vuelta. Las generales son diferentes, insistió, y el escenario electoral está abierto.