La periodista Flor Coll analizó desde el país ibérico el escenario electoral y el avance de los partidos políticos de extrema derecha, que rescatan la figura del dictador Francisco Franco y proponen retroceder con distintos derechos
España celebrará el domingo próximo sus elecciones generales, el primer paso para decidir la sucesión del presidente socialista Pedro Sánchez, quien buscará su reelección. La compulsa entre sectores progresistas y de la derecha extrema, la necesidad de tejer alianzas frente a la chance de que ninguno de los candidatos pueda conseguir la mayoría absoluta, abre interrogantes sobre el resultado final.
Licenciada en comunicación social, afincada en España, Flor Coll describió en La Marca de la Almohada el escenario que se abre frente a los comicios del domingo, luego de elecciones regionales donde se advirtió un crecimiento de los candidatos de la derecha y la extrema derecha, quienes proponen de acuerdo a la mirada de la periodista claros “retrocesos de derecho”.
“El Partido Popular (PP) y la creciente oleada de Vox, que es el partido de la derecha extrema, no tienen problema de juntarse ni para decir lo que van a hacer. Nada bueno se puede esperar. Me remito al archivo. Son personas que se juntan y proclaman a (Francisco) Franco, que fuera el dictador durante cuarenta años. Aquí, a diferencia de Argentina, no hubo un juicio, una revisión con una cantidad importantísima de desapariciones. Con la vuelta de la democracia se armó la ley de amnistía y no se revisaron estas cuestiones”, comentó Coll sobre los antecedentes en los que se asientan algunas experiencias políticas que crecen con el respaldo de votantes que pertenecen a diferentes estratos sociales.
“Sectores de bajos recursos, sectores medios. Vox tiene diputados y senadores en diferentes lugares de España, incluso Cataluña, donde está muy revisitada la situación del independentismo con la reivindicación cultural de la lengua, etcétera. Entre otras cosas Vox promete retroceder con todas las leyes de derechos para el colectivo LGTB. Ellos no creen en las violencias machistas. Lo han hecho público. Y tienen un discurso lleno de mentiras., ligado al miedo. Se habló durante dos años, sin ningún tipo de oposición de los medios, sobre la ocupación de casas. El cambio climático para ellos no existe. Dicen que es otra mentira de la izquierda. Es muy fuerte. Eran antivacunas, por supuesto. Terraplanistas. Todo lo negacionista que te puedas imaginar. Y hay gente que lo acompaña, que los va a votar”, resumió con preocupación y cierta incredulidad la periodista.
“Hay que recordar cómo se elige presidente en España. Se elige a los representantes que van a votar. Básicamente se habla de cómo van a lograr esos consensos. Parece que nadie va a llegar con mayoría propia. Ni Alberto Núñez Feijóo, del PP, ni Santiago Abascal, de Vox”, dijo sobre las negociaciones que desarrollan los sectores más conservadores.
Coll repasó las heridas que dejó en la coalición gobernante las modificaciones en la Ley de Consentimiento, conocida como “sólo sí es sí”, que permitió rebajas en condenas por delitos sexuales y hasta decenas de excarcelaciones.
“Hubo bastante ruido sobre eso. Hay bastante castigo no sólo mediático. Bastante castigo que cayó sobre Podemos, incluso sobre el propio Pedro Sánchez y sobre la ministra de Igualdad por la ley de consentimiento. El acompañamiento nefasto de muchos jueces hizo que muchos presidiarios que tenían condena por violación y situaciones de abusos o de violencia machista, hayan tenido reducción de pena. La derecha la utilizó para denostar y hacer de eso un show mediático, muy nefasto. Esto trazó las líneas para que Podemos haya quedado bastante desfavorecido en el armado, para sumar con otras fuerzas de izquierda que seguramente armarán consenso. Esperemos que el domingo, junto al PSOE (Partido Socialista Obrero Español), logren la mayoría para continuar cuatro años en España y no tengamos la vuelta de partidos nefastos que no tienen que ver con la democracia”, concluyó sobre las posibilidades que abre el escenario electoral español.