Para combatir el robo de bronce y cables de cobre, el municipio cerró comercios y denunció penalmente a 24 dueños que violaron anteriores sanciones.

En el marco de un recrudecimiento del robo de bronce, cables de cobre y otros metales, con casos significativos como los del teatro El Círculo, el Palacio de los Leones y el Monumento a la Bandera, el municipio dio a conocer que clausuró 57 chatarrerías clandestinas a lo largo y a lo ancho de la ciudad en lo que va del 2023. El número se desprende de un informe realizado por las áreas de control, teniendo en cuenta que se sospecha que esos lugares de acopio son los que reciben el botín obtenido de manera ilegal mediante hechos de sustracción y vandalismo. A su vez, presentaron en la Justicia provincial 24 denuncias penales a propietarios de este rubro por haber violado anteriores cierres.

En este contexto, la Secretaría de Control y Convivencia comunicó que, para combatir la ola de delitos predatorios, durante 2023 realizó inspecciones en 76 locales dispuestos como lugares de compra y venta de metales en la ciudad. De allí, se desprendieron 57 clausuras por distintos motivos, pero principalmente por faltante de habilitación y condiciones de seguridad e higiene. En todos los casos, el trabajo fue en conjunto con la Policía de Santa Fe, para que cada organismo pudiera realizar el registro del local de acuerdo a sus competencias: los inspectores municipales verificando la estructura y la documentación del lugar y los agentes policiales fiscalizando si la mercadería era legítima o tenía como procedencia un acto ilícito.

En la mayoría de los procedimientos los agentes trabajan con la policía, con esta metodología: se concurre al lugar, en principio se busca si están habilitados o no, y si corresponde se genera la clausura. Después vuelven a ir, y si detectan que reabrió se hace la violación de clausura una y otra vez, ya que en algunos casos esto se produce una repetición de la sanción. Pero no todo termina ahí. Luego, en la mesa de seguridad de la que participan en conjunto con Fiscalía, se hace llegar toda la planilla que confeccionaron con las correspondientes denuncias penales al fiscal provincial Matías Ocariz, que toma todos los casos de chatarrerías, para que ordene los allanamientos.

A partir de estas acciones, el municipio verificó que 24 de estos comercios tenían una clausura previa y, a pesar de esa sanción seguían realizando su actividad comercial. Comprobando las violaciones de clausura citadas, la Municipalidad presentó al Ministerio Público de la Acusación 24 denuncias penales a los propietarios de los locales. Desde el inicio de esta gestión en diciembre de 2019, se presentaron en la denuncia ordinaria 56 denuncias penales vinculadas a esta actividad en particular. De las 57 clausuras, 16 pertenecen al Distrito Sudoeste, 15 al Norte, 11 al Oeste, 8 al Noroeste y 7 al Sur. En tanto, en el Distrito Centro no se registraron locales dedicados a este rubro, o al menos, inscriptos a tal fin.