Luego de la agresión que sufrió un chofer la concejala reclamó que el municipio actúe de oficio y aplique sanciones ejemplificadoras. Además, insistió para que se aplique la ordenanza que regula el manejo discrecional de las paradas
Luego de la agresión que sufrió un taxista en un sector de la Terminal de Ómnibus de Rosario, una acción en la que estarían involucrados dirigentes del Sindicato de Peones de Taxis, la concejala Fernanda Gigliani reclamó que el municipio actúe de oficio para dar con los responsables y aplique sanciones “ejemplificadoras”.
“Lo que corresponde es que el Estado, en este caso el Ente de la Modalidad, pida las imágenes de las cámaras y, de acuerdo a lo que se observa, sancione a quien corresponda. Es una forma de proteger a este taxista. Nos vivimos llenando la boca hablando de que queremos combatir las mafias y no podemos resolver ni siquiera lo que es de nuestra competencia”, criticó la edil de Iniciativa Popular en diálogo con Apuntes y Resumen.
José Luis, un chofer de taxi, esperaba el lunes para recoger pasajeros. Se encontraba en el primer lugar de la fila cuando, de acuerdo a su testimonio, fue atacado por una patota. “Estaba sentado esperando el turno. Era el primero. Uno me dio un cabezazo y me empezó a pegar. Cuando me quise defender el otro me agarró de la mano de atrás y otro más me empezó a pegar. Eran como diez”, contó el trabajador golpeado.
De acuerdo a distintas denuncias entre los agresores están involucrados dos personas a los que se conoce con los apodos de “Diente” y “Torta”, quienes pertenecerían al Sindicato de Peones.
Gigliani planteó que existe “un grupo muy pequeño que se arroga la facultad de regentear quién sube pasajeros y quién no en el ámbito de la terminal”, lo que transgrede las normas municipales vigentes. “Tenemos una ordenanza que define que las paradas de taxis son libres y públicas”, aclaró. Los episodios de agresión a taxistas son recurrentes y se repiten desde hace largo tiempo en la Terminal de Ómnibus.
“Estamos escuchando al intendente indignado porque a tal le corresponde tal cosa y a tal le corresponde tal otra. Esto le corresponde a su estricta competencia porque está pasando frente a su propia cara. El Ente de la Modalidad tiene sede en la Terminal de Ómnibus”, detalló.
“Presentamos proyectos que fueron aprobados por el Concejo Municipal y que todavía la intendencia no ejecuta. ¿Qué decíamos nosotros? Hagamos una reformulación física en las paradas de la terminal de ómnibus, justamente para evitar que un auto pueda adelantarse por sobre otro que llegó después, porque hay algunos que regentean la parada. Hasta el día de hoy no hemos logrado que eso se ejecute”, insistió sobre una ordenanza que pretende ordenar la operatoria de pasajeros y evitar que algunos sectores se impongan para manejar la prioridad y el uso en las paradas dispuestas en la terminal.
La concejala reclamó que por el episodio se apliquen “acciones ejemplificadoras” que permitan a las y los ciudadanos comprobar que el Estado “los protege”.
“Si no pasa nada y esto se naturaliza el mensaje es que al Estado le da lo mismo. Es un pésimo ejemplo. Hoy está naturalizado que muchos varones y mujeres taxistas no van a la terminal porque tienen miedo. Es un pésimo ejemplo”, concluyó Gigliani.