El delegado del Ente Nacional de Comunicaciones en Santa Fe respondió en duros términos al intendente de Rosario por haber dicho que el sistema le daría mejor conectividad a los detenidos de alto perfil para que continúen con sus actividades delictivas. Le adjudicó irrsponsabilidad y “cierta malicia”
“Esa fibra óptica van a ser muertes en Rosario”, había dicho el intendente de Rosario Pablo Javkin en referencia al comienzo del tendido de redes de fibra óptica en el penal federal de Marcos Paz, donde están detenidos varios líderes de bandas criminales rosarinas, entre los cuales se encuentra Guille Cantero, de Los Monos. El jefe del Palacio de los Leones interpretó en sus dichos que el sistema era para los internos, pero rápido le salieron a contestar desde Nación que se trata de una mejora para la Justicia, porque la mejora de conectividad posibilita la toma de declaraciones a los presos en los mismos penales evitando así la peligrosa logística del traslado a sedes de tribunales.
El primero en responderle a Javkin fue el director del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom), el licenciado en Ciencia Política oriundo de Salta Gonzalo Quilodran. En Apuntes y Resumen dialogaron con el delegado del organismo en Santa Fe, Franco Marcos Balzaretti. El funcionario fue tan contundente como su superior: “Me llama la atención el grado de irresponsabilidad con el que el intendente hace estas declaraciones… noto que hay cierta malicia en lo que se dice, está muy sacado de contexto”.
“Lo que el Enacom está haciendo es cablear los penales federales, pero para que los presos no salgan de la cárcel”, insistió Balzaretti. Es en referencia a una mayor calidad (en velocidad y ancho de banda) de la conectividad a internet para poder desarrollar las audiencias o declaraciones a los internos en el interior de las cárceles y minimizar los traslados a tribunales. Una logística que implica riesgos no sólo potenciales. La provincia de Santa Fe es paradigmática en eso, y el delegado lo marcó: fugas, tiroteos, emboscadas, que varias veces terminaron en asesinatos.
“Nadie, y menos con un decreto –en referencia a la Resolución 2183 de 2021, le daría conectividad a los internos. En colaboración con la justicia, lo que se están armando son espacios dentro de lo penales para que los internos declaren dentro del mismo”, insistió Balzaretti.
El proyecto tiene un presupuesto inicial asignado de mil millones de pesos que salen del Fondo Fiduciario del Servicio Universal.
“Nos llama la atención que el intendente de una de las ciudades más importantes del país –por Javkin– no sepa lo que se hace y para qué se hace”, continuó el representate del Enacom en Santa Fe. Es más, concedió que podría ignorar el objetivo de ese plan de conectividad, pero completó que aún en ese desconocimiento, el mandatario local fue irresponsable en sus declaraciones públicas: “Salir a plantear una posición de esta manera, generando el caos, el pánico y el enojo de la gente en un momento donde necesitamos estar unidos, la verdad es que molesta demasiado.
Incluso insiste” después de las aclaraciones, cuestionó el funcionario nacional.
Es que Javkin, tras las aclaraciones de Quilodran en un hilo de tuits, volvió sobre el tema este miércoles: “Es una vergüenza que un área de jerarquía como el Enacom no sepa que el Gobierno nacional, con el Ministerio de Justicia, ha disuelto el área de inteligencia criminal penitenciaria. El problema no está en las audiencias virtuales, sino en cómo termina después. Lo que se hace para mejorar las audiencias virtuales termina mejorando la conectividad de los que están condenados para organizar delitos”, continuó Javkin el entredicho.
Balzaretti explicó que no habrá ningún wi fi abierto en los penales, y que la conectividad estará circunscripta a los espacios especialmente habilitados para las declaraciones judiciales de los detenidos y, en aquellas dependencias con actividades educativas, a las aulas dispuestas para las clases. En ese punto, remarcó, también para reforzar la seguridad ya que de ese modo los docentes no tendrán que estar presentes gracias a que podrán funcionar los modos remotos o virtuales de enseñanza-aprendizaje.
El funcionario nacional admitió el problema de la tenencia de teléfonos móviles por parte de los internos en los penales, un dato público y una irregularidad que de tan reiterada luce normal. Y peligrosa, porque en el caso de las bandas criminales que operan en Rosario ha posibilitado la continuidad de las jefaturas por parte de los cabecillas presos y hasta el encargo de asesinatos. Balzaretti reconoció el problema, pero aclaró que no es responsabilidad del Enacom, sino de las fuerzas de seguridad y del Servicio Penitenciario, permeados por la corrupción y posibilitadores del ingreso de los dispositivos a las unidades de detención.